Blanco, Negro y colores de las Salinas: sonrisas donde morían lágrimas

LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||

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La Exposición Las Salinas Blanco/Negro y a Color de la pintora Julia Castillo y el fotógrafo Leo Salazar, ha provocado favorables críticas desde su puesta en exhibición, el pasado martes 17, en el Museo de las Casas Reales, calle Las Damas, esquina Mercedes, en la Ciudad Colonial de esta capital.
 
Lo sublime se logra al comprobar que el lente de Salazar y el pincel de Castillo, hayan fundido una mirada común, diversa y a la vez íntima sobre ese poblado Puerto Bonito de Las Salinas, donde se funden tonos y propuestas visuales como representatividad de contenidos que implican, definitivamente, una realidad social.
 
Leo Salazar, experimentado fotógrafo, también cineasta; apasionado y sensible testigo de excepción, emplea con profesional sabiduría ese simbólico sentido del blanco y negro, como recurrente “síntesis de todos los colores… símbolo de lo absoluto, de la unidad y de la inocencia,… paz o rendición”.
 
Por su parte, Julia Castillo, directora del Centro Cultural Perelló, ubicado en Baní, capital de la provincia Peravia, reproduce su magna sensibilidad humana, con lágrimas multiplicadas en rostros y simbólicos promontorios de una sal que refulge en cultura, tradiciones y modo de vida de una comunidad que sueña, sufre y cree en un futuro mejor.
 
Coinciden y funden ambos artistas sus miradas en este terreno de salinas, visitado por turistas del mundo entero, que después de una mirada artística como esta exposición: Las Salinas Blanco/Negro y a Color, podrán quizás interpretar de otra manera el sitio que es: “Mina de sal a flor de tierra y duro sol, pueblo de pescadores envuelto entre dunas y montañas…”.
 
Tal vez pudieran cerrar estas líneas aquellas frases del apóstol José Martí: «El amor al arte aquilata el alma y la enaltece: un bello cuadro, una límpida estatua, un juguete artístico, una modesta flor, un lindo vaso, pone sonrisa en los labios donde morían tal vez… las lágrimas».