Las fraternales relaciones entre República Dominicana y Venezuela vivieron una nueva expresión con un encuentro deportivo realizado entre la Embajada del país suramericano aquí y el Ayuntamiento de Santiago de los Caballeros.
Dos partidos de softbol en el estadio Miguel Diloné de la segunda ciudad más importante de la nación caribeña constituyeron una acertada manera para reforzar los vínculos bilaterales de amistad, coincidieron sus organizadores y participantes.
En el primer partido, los anfitriones, encabezados por el alcalde, Gilberto Serulle, derrotaron 12-2 a los visitantes, y salieron dispuestos a vencer en el segundo desafío.
Sin embargo, el equipo de la sede diplomática, bajo la guía del primer secretario y encargado de negocios, Gerardo Delgado, dejó al campo a sus contarios 5-4 en medio de un gran bullicio en las gradas.
«Todos ganamos en el terreno de juego, y también triunfó la amistad y la hermandad entre los pueblos», destacó Serulle en conversación con Prensa Latina.
«Uno de los ejes de nuestra gestión socialista, recalcó, es impulsar y fortalecer los vínculos entre los países, principalmente los de América Latina, y este domingo hemos avanzado en tal sentido.
«Nosotros nos sentimos verdaderos hermanos de Venezuela, y estamos agradecidos eternamente de todo lo que hizo el fallecido presidente Hugo Chávez por nuestra nación», enfatizó.
Serulle adelantó que el Ayuntamiento celebrará iniciativas similares a favor de la integración con otros miembros de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América.
A ese bloque, surgido en diciembre de 2004 bajo los principios de la complementariedad y la igualdad, pertenecen Cuba, Venezuela, Bolivia, Nicaragua, Ecuador, Antigua y Barbuda, Dominica, San Vicente y las Granadinas, y Santa Lucía.
Este intercambio deportivo nos acerca más al pueblo cibaeño de Santiago de los Caballeros y a sus autoridades, y contribuye a estrechar los lazos de cooperación existentes, subrayó Delgado.
Recordó que se cumple un año de la última victoria electoral de Chávez, quien legó múltiples enseñanzas a sus compatriotas y al mundo.
Los lamentables acontecimientos posteriores a esa fecha hicieron pensar a los opositores que la Revolución bolivariana tenía sus días contados, pero los venezolanos supieron estar a la altura de las circunstancias, expuso.
«Tras la muerte del llamado Comandante Eterno, el pasado 5 de marzo, sostuvo, votamos por un destino que nos hará más libres, soberanos y dispuestos a continuar con los valores de la patria socialista».
