Fue, sin duda, una de las intervenciones más aplaudidas, la de la secretaria general de la Federación de Mujeres Cubanas (FMC), e integrante del Consejo de Estado de la República de Cuba, Teresa Amarelle Boué, durante la XII Conferencia Regional de la Mujer de América Latina y el Caribe, que recientemente sesionó en la capital dominicana.
La directiva de la organización femenina que lideró las más importantes transformaciones por la reivindicación de la mujer en Cuba y su inserción en el desarrollo socio, económico y político, Amarelle Boué, agradeció a la ministra de la Mujer de República Dominicana, por haber creado las condiciones necesarias para la realización de la conferencia, en la cual, tal y como afirmó “en el continente la pobreza sigue mostrando un rostro femenino”.
La secretaria general de la FMC se refirió a las palabras de Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), acerca de que “los indicadores de autonomía económica de las mujeres continúan siendo el mayor desafío para las políticas públicas”, según trascendió en el tercer informe del Observatorio de Igualdad de Género en América Latina y el Caribe: “Las mujeres siguen siendo objeto de despidos, de empleos precarios, del mercado informal y los bajos salarios”.
De los caminos de “unidad, integración y cooperación inspirados en los ideales de sus libertadores” habló la conferencista, quien profundizó en la necesidad de un desarrollo inclusivo, “en el que las mujeres forman parte de la construcción de esas nuevas realidades”.
Cuba en estadísticas
Teresa Amarelle explicó: “El Consenso de Brasilia guarda coherencia con el vigente Plan de Acción de la República de Cuba de Seguimiento a la IV Conferencia Sobre la Mujer.
“Mi país avanza en la actualización de su modelo económico, concebido en un proceso participativo, al que las mujeres se han incorporado con su creatividad, respaldadas por un cuerpo legislativo que potencia la equidad y protege a las adultas mayores, las madres solteras, las personas con discapacidad que lo necesiten”, indicó.
Sobre el cumplimiento de los principales indicadores de los Objetivos de Desarrollo del Milenio, la secretaria recordó las cifras alcanzadas en mortalidad infantil, de 4,6 por cada mil nacidos vivos, la más baja de América Latina, y la materna directa de 21,5 por cada 100 mil, entre las más bajas a nivel internacional.
Destacó, además, que las mujeres son el 48% de los empleados en el sector estatal civil, el 66% de los técnicos y profesionales. “A partir de las nuevas medidas económicas, se han ido incorporando al trabajo por cuenta propia, donde ya representamos el 29%, con derecho a la seguridad social y a la licencia de maternidad”.
En torno a las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones, tema que marcó el centro de los debates de la XII Conferencia, la representante de las mujeres cubanas subrayó que “debe ser un instrumento para el desarrollo y no para promover la violencia, el sexismo, la xenofobia”. En tal sentido informó que se promueve dicho uso, según sus posibilidades técnicas y económicas, “bajo los principios éticos de nuestra sociedad, de manera igualitaria y no discriminatoria para garantizar el acceso universal y sin distinción de sexo, ni raza, ni discapacidad, ni origen geográfico”.
Tras librar la gran batalla contra el analfabetismo desde 1961, la educación ha sido y es un derecho garantizado universal y gratuito, comentó Amarelle Boué y reseñó el lugar privilegiado que marca en la estrategia del Estado el sector de la informática y las comunicaciones: “EL 45% de sus trabajadores y el 40% de los directivos son mujeres, a quienes se ha favorecido con la introducción de la computación en todos los niveles en el Sistema Nacional de Educación”.
También trascendió en la intervención de la dirigente femenina la significativa presencia de muchachas entre los estudiantes de la Universidad de Ciencias Informáticas, que supera el 68%; así como los jóvenes clubes de computación y electrónica, que constituyen- dijo-, un programa comunitario que abarca todo el país y cuenta actualmente con 600 instalaciones.
Un recorrido por las estadísticas actuales muestra que Cuba se ubica en el segundo lugar entre los países con mayor representación de las féminas en diferentes sectores: “La proporción de mujeres es de 66,2% en la Contraloría General de la República, el 76% de jueces profesionales y el 77,8% de los fiscales. Unas 8 son ministras y 40 viceministras; el 48,86% son diputadas a la Asamblea Nacional del Poder Popular.
“De los tres cargos de primer nivel en la actual Legislatura, dos están ocupados por mujeres. En el Consejo de Estado, órgano que representa a la Asamblea Nacional entre periodos de sesiones, creció la proporción de mujeres, a un 41,9%. Por primera vez este Consejo cuenta con dos vicepresidentas”, acentuó.
A pesar del bloqueo
Finalmente, Teresa Amarelle Boué reflexionó durante su intervención en lo que constituye “la mayor violación a los derechos humanos de todo un pueblo”, el bloqueo económico, comercial y financiero impuesto a Cuba hace más de medio siglo por los Estados Unidos, a causa del cual “se dificulta la compra de equipamientos a mejores precios, la adquisición de software y otros productos. Asimismo el país tiene vetada la conexión a los cables submarinos que pasan cerca de la Isla, lo cual encarece las comunicaciones y dificulta los intercambios de información.
“Cada avance logrado por Cuba, significa un paso más en el camino de la construcción de una sociedad más justa, equitativa e inclusiva. Cada desafío, constituye un estímulo a seguir trabajando para la eliminación de las brechas aún existentes… Es nuestra voluntad trabajar unidas en la búsqueda de un mundo más equitativo y justo, de paz e igualdad, imprescindibles para la preservación de la especie humana”, concluyó.
“La pobreza sigue mostrando rostro femenino”
LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||
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