“Reserva permitió país fuera declarado con cacao de calidad” (II)

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La Fundación Loma Quita Espuela, Inc. (FLQE), entidad sin fines de lucro creada el 22 de marzo de 1990, en San Francisco de Macorís, provincia Duarte, continúa su misión de “desarrollar acciones para garantizar el equilibrio entre la conservación y el uso razonable de los recursos naturales”; así como el mejoramiento de la calidad de vida en las comunidades directamente vinculadas a la Reserva.
 
Esta fundación, además de preservar el medio ambiente, se ha convertido en una fuente de trabajo para jóvenes emprendedores que junto a Jesús Moreno impulsan diversos proyectos a favor del ecosistema.
 
“Una entidad de protección ambiental es exitosa cuando puede irse de la comunidad y los pobladores asumen el compromiso de preservar y cuidar su entorno”, afirma Moreno.
 
Uno de los jóvenes que labora en la entidad es Ramón Belén, nacido en Sambrana, Cotuí y que ha hecho suyas las montañas que ayuda a preservar. Tan pronto egresó de la universidad como ingeniero agrónomo, fue acogido por la Fundación, donde se desarrolla como encargado técnico de Foresta y supervisión de la Reserva Zorzal. Es además responsable del subprograma de Agricultura Sostenible y Producción Animal.
 
Durante un programa de capacitación, a Belén se le ocurrió la brillante idea de instalar una hidroeléctrica en la comunidad El Jamo, con el propósito de frenar la desforestación que había en la zona: “Pensé que con esa medida los lugareños rehusarían de seguir con la tala de árboles y cuidarían más su ecosistema, ya que con la hidroeléctrica recibirían agua y luz gratis. Así fue”, explica el joven ingeniero.
 
Ante esta victoria de la Fundación, su presidente Jesús Moreno confiesa que han asumido la posición de dialogar y explicarles a los campesinos la importancia de cuidar el medio ambiente, puesto que ellos protagonizan esa importante labor y todo cuanto hace la institución es para que puedan vivir mejor, indica.
 
“Procuramos que no se destruya la naturaleza, y también creamos proyectos como acueductos, producción de miel y agricultura de ciclo corto, a fin de que puedan vivir de su entorno y sin causarle daños”, manifiesta Moreno.
 
Agrega que anteriormente, el agricultor quemaba, sembraba, y luego se iba a otro sitio a hacer lo mismo, porque no tenía otra alternativa que no fuera vivir de la depredación, pero este panorama está cambiando.
 
-¿Cuánto se han recuperado los bosques de esta Reserva?
“Los resultados indican que se ha recuperado en más del 53%, según valoración de científicos internacionales y locales. El bosque recuperado permitirá a la naturaleza cumplir su rol de productor de agua.
 
“La zona donde se encuentra la Reserva tiene 72.5 km2. En ella nacen 60 ríos y arroyos que abastecen a comunidades de las provincias Duarte, Salcedo y María Trinidad Sánchez. El 56% de estas corrientes de agua desembocan en el río Nagua, 28 en el río Boba y 15 en el río Guaba”, informa el presidente.
 
-¿Qué otros logros ha obtenido la Fundación?
“Lo primero es que se ha logrado el mejoramiento de las condiciones de vida de las personas que habitan la zona y la preservación y recuperación de los recursos naturales. Contamos con una comunidad organizada y dispuesta a superar las condiciones de pobreza.
 
“Es la comunidad quien resguarda las fuentes de agua se organiza en grupos de interés para cuidar las zonas frágiles de la Reserva”, apunta.
 
Resultados
 
El aumento en la cobertura de los suelos ha sido el resultado de un proceso de negociación con los habitantes de la Reserva para despoblar las zonas más frágiles. La comunidad de Nagua se ha integrando exitosamente. Está pasando a ser una comunidad protectora.
 
En tal sentido, Jesús Moreno declara que han llevado a cabo un sistema para educar a los infractores. Amplía el también presidente de Helados Bon, que el modelo ha funcionado con éxito para la Fundación Loma Quita Espuela, con la creación de un Comité de abogados, amigos de Quita Espuela, que da seguimiento a los conflictos en el uso de los recursos naturales, donde cada abogado se compromete con dar seguimiento a los casos, siempre con un enfoque humano.
 
El cacao orgánico se cultiva con éxito y ya nadie recuerda, tal y como narra Moreno, que en el año1998, con el paso del huracán George, los propietarios de fincas empezaron a tumbar el 30% del cacao y se vislumbraba una ola de desforestación, “entonces hicimos una alianza con la Fundación Loma Quita Espuela y Helados Bon, siendo yo presiente de ambas instituciones.
 
“Con esta alianza se promovió la producción de cacao orgánico, sin ningún químico. Esto gustó a los campesinos y el grano volvió a recuperar su valor. La Empresa Bon ofrecía helados de cacao orgánico, lo cual fue una innovación. Después de implementar varias estrategias comunicacionales, hubo una sobrerreacción y los exportadores como Rizek y Roig instalaron secadoras gigantes para comprarlo en la baba, o sea acabado de tumbar. Tras esa gran inversión, la República Dominicana fue declarada el país con cacao de mejor calidad”.
 
En ese sentido, Ramón Belén recuerda que en aquel tiempo el cacao pasó de RD$1,500 a cotizarse a RD$7 mil el quintal. Actualmente se vende a RD$3 mil 300. “Todo esto fue el resultado de la certificación realizada por la Fundación en el 2001, para asegurar que el cacao fuera ciento por ciento orgánico; así también se capacitaron a los productores para que crearan su propio abono con los residuos de la finca”, subraya el ingeniero agrónomo.
 
Ecoturismo
 
Otra joven talentosa que trabaja en la Fundación Loma Quita Espuela es Hosmendy Almánzar, encargada de ecoturismo y educación ambiental para niños, niñas y adolescentes.
 
Abordada por DominicanosHoy, responde que en este momento están avanzando en esta área, donde Quita Espuela ofrece escenarios realmente competitivos: “Contamos con la ruta el Sendero de la Nube, que tiene 985 metros sobre el nivel de mar, y es la primera escala para llegar a la cima de la Loma.
 
“En ese recorrido se hacen doce paradas y se les explica a los turistas acerca de la fauna, la flora, y las especies endémicas; así también, se relata el maravilloso viaje del ave el Zorzal, oriunda de los Estados Unidos, pero que viene al país a alimentarse. Este atractivo acontecimiento ha incrementado la cantidad de turistas, pues antes el mes más concurrido era marzo, y ahora se ha extendido hasta septiembre y febrero”, relata con manifiesto entusiasmo Almánzar, quien ha sido propuesta como joven del año en San Francisco de Macorís, por alta profesionalidad y empeño.
 
Otra atracción del ecoturismo es la Reserva del Zorzal, localizada en la comunidad del Guineal, terreno dedicado a la siembra de la exótica planta de macadamia, una especies de nuez, utilizada entre otras cosas, para hacer deliciosos helados, y en cuyo cultivo se emplean métodos absolutamente naturales y orgánicos, a los cuales prestan toda su atención y esfuerzos el presidente Jesús Moreno y el encargado técnico de Foresta y supervisión de la Reserva, Ramón Belén.
 
Continuará…