De Rosado Mateo a Liriano Sánchez

LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||

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Los documentos encontrados en la finca del Teniente coronel Johan Liriano Sánchez ponen en evidencia su vinculación con la red de sicarios liderada por Félix Cordero Febles (Copelín).
Además, de estas pruebas la policía en una conferencia de prensa asegura que en un apartamento propiedad de este oficial defendido por el Mayor General activo Rolando Rosado Mateo como una persona que “tuvo un buen desempeño en la Dirección Nacional de Control de Drogas DNCD)”. No solo eso, sino que “los argumentos utilizados por el Consejo Superior de la Policía Nacional para la destitución de Liriano Sánchez son fruto de un libelo emitido en el 2011”.
En su afán por limpiar a Liriano Sánchez el Mayor General Rosado Mateo lo acompañó a los medios de comunicación para defender su “honorabilidad”.
Durante una presentación magistral el coronel Jacinto Minaya, sub-director de Investigaciones Criminales llama la atención de que “el Teniente coronel Liriano Sánchez tenía un historial delictivo en los Estados Unidos en el Departamento de Justicia Criminal de Massachusetts por usar una placa falsa de vehículo (1994), violación a la propiedad privada (1995), asalto y agresión doméstica a su esposa y porte de arma de fuego sin licencia (1998)”.
Las autoridades norteamericanas deportaron a Liriano Sánchez, y una vez estando en la República Dominicana ingresa a la fila de la Policía Nacional ascendiendo meteóricamente de rango a Teniente coronel.
Lo interesante es que se diga quién o quienes hicieron posible el ingreso a la policía de este delincuente. Quizás Rosado Mateo tenga una explicación sobre esto porque Liriano Sánchez era su asistente en la DNCD y se estila que para designar a una persona en esa posición se depura.
Lo cierto, es que Liriano Sánchez era un alto oficial de la policía en el momento de estar vinculado a la red del sicario de Copelín, según los datos suministrados por la policía en la rueda de prensa.
Estamos frente a un escándalo mayúsculo lleno de tramas, sicariato, asesinatos y lavado dinero proveniente del narcotráfico.
El presidente Danilo Medina, debe dar un ejemplo en el presente caso porque no se puede tolerar que un Mayor General activo como Rolando Rosado Mateo “califique de libelo los documentos presentados para destituir al Teniente coronel, Liriano Sánchez y no pase nada.
Definitivamente se requiere de una reacción ejemplar del presidente porque no puede haber vacas sagradas y delincuentes preferidos en las filas de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional
Presidente Medina actúe con fuerza, rapidez y drásticamente. No hay de otra en caso como este.