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La fórmula del éxito para Liverpool

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El desarrollo de la carrera del Liverpool esta temporada ha sido notable — el equipo de Brendan Rodgers ha pasado de caso perdido, a forastero, a enigmático, a competidor, a contendiente, hasta finalmente convertirse en favorito.
 
La mayoría de los observadores predijeron que el Liverpool tendría una batalla cuesta arriba para clasificar a la Champions League esta temporada. Sin embargo, a cuatro partidos del final de la campaña, un primer título de la Premier League ya es ampliamente anticipado.
 
El destino del Liverpool está en sus propias manos: cuatro victorias y el título es suyo. Tres victorias y un empate ante el Chelsea, y también triunfarán. Una victoria ante el Chelsea, y probablemente puedan darse el lujo de tropezar en otro encuentro. Suena extraño que se considere un fracaso si el Liverpool no gana el título de la Premier League esta temporada, teniendo en cuenta las expectativas al comienzo de la campaña… pero esta posición es demasiado fuerte como para dejarla escapar.
 
Una de las cosas más fascinantes sobre el enfoque de Rodgers en los últimos meses ha sido la variedad de sistemas que ha utilizado, a menudo confundiendo a sus oponentes con formaciones sorpresa, que es en parte la razón por la cual el Liverpool tiene la mejor marca local de la división. Echemos un vistazo a los formatos que Rodgers podría darle a su equipo en los últimos cuatro partidos del Liverpool.
 
Fecha 35: Norwich City (visitante)
Factores positivos: El excelente registro de Luis Suárez contra Norwich, y el hecho de que los canarios han ganado solamente uno de sus últimos siete encuentros.
 
Factores negativos: Jordan Henderson está suspendido, y la disponibilidad de Daniel Sturridge es dudosa por lesión.
 
Anteriormente, Norwich era el equipo más predecible de la Premier League bajo Chris Hughton, pero el reciente nombramiento de Neil Adams podría darles un impulso a los canarios. Sin embargo, Rodgers no debería tener que preocuparse por las tácticas de Norwich en la previa de este partido, y en realidad lo único que importa es cómo compensar las ausencias de Henderson y Sturridge.
 
La ausencia de Henderson es un golpe grande, porque significa que Rodgers se verá obligado a darle a su mediocampo un enfoque más cauteloso, sin importar si juegan con Joe Allen o Lucas Leiva. Significa que Coutinho será extremadamente importante para conectar el mediocampo con el ataque.
 
Si Sturridge no llega al partido, Rodgers se verá tentado a retomar la formación de 4-3-3. Liverpool no tiene otro delantero lo suficientemente bueno como para justificar jugar con dos al frente y un mediocampo en forma de diamante, y sería más lógico que Sterling vuelva al lateral, posiblemente con Victor Moses jugando del lado opuesto.
 
En definitiva, la clave es facilitarle el balón a Suárez tan a menudo como sea posible. Once goles en sus últimos cuatro partidos contra Norwich, incluyendo tres tripletes, significan que el conjunto de Adams estará aterrorizado por el uruguayo, quien podría llegar a ganar este partido por su cuenta.
 
Fecha 36: Chelsea (local)
Factores positivos: Un empate sería suficiente para el Liverpool, y el hecho de que el último juego ‘decisivo’ de la Premier League sea en Anfield es un gran impulso.
 
Factores negativos: Suárez no ha convertido contra otro equipo Top 4 esta temporada, y la ausencia de Henderson podría ser más significativa en un partido tan importante.
 
En el juego restante más importante del Liverpool, Rodgers enfrentará su desafío táctico más difícil de la temporada.
 
El Chelsea en general se ha destacado ante oponentes de alto nivel porque son muy peligrosos en el contraataque. Su victoria por 1-0 sobre el Manchester City es particularmente impresionante, y la paliza de 6-0 que le dieron al Arsenal fue una manifestación más brutal de su potencia y velocidad. El peligro, claro está, es que el Liverpool arranque el partido dominando y deje espacios abiertos para el contraataque.
 
Esto requiere un enfoque más cauteloso, y si bien Rodgers seguramente afirmará que su equipo no jugará por el empate, este resultado seguramente le estará dando vueltas en la cabeza. Aquí, un mediocampo de diamante tiene más sentido ante un conjunto extremadamente sólido en esta zona, y a Rodgers probablemente no le importará dejar a Branislav Ivanovic y a Cesar Azpilicueta libres — es un precio bajo a pagar por una ventaja en el mediocampo, y el hecho de que el Chelsea no tendrá un hombre libre contra la dupla SAS.
 
Este partido podría exigir la reintroducción de Lucas Leiva, quien no ha tenido más que apariciones esporádicas desde que se recuperó de su lesión — pero su disciplina defensiva ha sido crucial. Ante Stoke City en enero, su último partido completo antes de la lesión, y como suplente contra el West Ham el fin de semana pasado, Lucas jugó apenas por delante de Steven Gerrard, el centrocampista más profundo. Podría tratarse de una concesión prolija — Rodgers necesita más acero a mitad de cancha pero no quiere alterar el juego de Gerrard, dadas sus excelentes condiciones.
 
Suárez y Sturridge podrán trabajar en conjunto contra los defensores centrales del Chelsea, y su ritmo debería facilitarle al Liverpool claras chances de gol.

Fecha 37: Crystal Palace (visitante)
Factores positivos: El Palace estará a salvo para esta instancia, con poco en juego.
 
Factores negativos: El registro defensivo del Palace es magnífico, y ha ganado sus últimos cuatro partidos.
 
El Liverpool se enfrentará a un equipo que probablemente jugará atrás. El conjunto de Rodgers seguramente dominará la posesión, pero tendrá que asegurarse de que el ritmo de sus pases sea lo suficientemente rápido como para mover constantemente a los defensores del Palace — los jugadores de Tony Pulis saben exactamente qué hacer cuando sus rivales hacen pases lentos.
 
El diamante probablemente siga siendo una buena apuesta aquí, ya que permitirá que los zagueros empujen hacia adelante y abran el ancho necesario para estirar la defensa del Palace, con tres delanteros claves en posiciones centrales, listos para convertir.
 
Henderson aún estará ausente, y como en el partido ante Norwich, a Rodgers le preocupará que a su equipo le falte movimiento constante hacia adelante desde el mediocampo. Con un gol temprano, el Liverpool estará bien — pero si siguen 0-0 a la media hora, éste podría convertirse en el partido más frustrante de la campaña.
 
Fecha 38: Newcastle (local)
Factores positivos: Henderson habrá regresado de su suspensión, y Newcastle ha perdido sus últimos cuatro partidos.
 
Factores negativos: La presión.
 
Durante los últimos dos meses, éste parecía ser el partido final ideal para el Liverpool. Ningún otro equipo ha sido más abatido en la segunda mitad de la campaña que Newcastle, que aparentemente tomó la pérdida de Yohan Cabaye como el final de su temporada. Algunas de sus actuaciones desde entonces francamente han sugerido que no les importa. Esto sería particularmente útil para el Liverpool, por supuesto, en el caso improbable de que necesite aumentar su diferencia de goles.
 
También existe la posibilidad de que un empate selle el título, pero el Liverpool saldrá en busca de la victoria.
 
Rodgers querrá alinear a su conjunto más ofensivo, lo que significa que Gerard, Henderson, Coutinho, Sterling, Sturridge y Suárez jugarán juntos por primera vez desde la victoria del fin de semana pasado sobre el Manchester City, aunque sus actuaciones previas determinarán si aplican una formación de 4-3-3 o el diamante en el mediocampo — con la versatilidad impresionante de Sterling, ambos esquemas son posibles para este plantel.
 
El problema principal, sin embargo, es la presión.
 
Hace dos temporadas, el Manchester City tenía la mejor marca local de la división, y simplemente tenía que ganar en casa ante los QPR, quienes tenían la peor marca visitante de la división, para ganar la Liga — sin embargo, estuvieron a punto de ser superados por diez hombres. Los actos heroicos de Edin Dzeko y Sergio Agüero los salvaron, por supuesto, pero la presión era evidente.
 
Sin embargo, los QPR se estaban jugando la supervivencia. A Newcastle no le importa. Si el Liverpool llega a la última jornada en busca de una victoria necesaria — los mayores peligros se encuentran en los dos partidos anteriores.

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