Una Semana Santa marcada, en algunos casos por recogimiento e introspecciones y, en otras, por incontinencias que marcaron el luto en una veintena de familias, de acuerdo al boletín del operativo “Semana Santa 2014: por tus valores y tu seguridad”, llevado a cabo por el Centro de Operaciones de Emergencia (COE) y apoyado por numerosas instituciones y organismos del país, que indiscutiblemente ofrecieron sus servicios en carreteras, autopistas y cada uno de los sitios donde se conglomeraban los vacacionistas.
Pero, las indisciplina y descontroles individuales no atañen a los miles de agentes y voluntarios; ni tampoco pueden evitar las negligencias de los mayores que permitieron a niñas y niños ingerir bebidas alcohólicas. De nada valen vigilancias “especiales y extremas” para que quienes anden tras el volante no conduzcan bajo los efectos del alcohol… Todo implica la conciencia individual y el sentido del límite.
Una vez más habrá que reflexionar con profundidad y verdaderos sentimientos de responsabilidad por la propia vida, la de nuestros familiares y el bien social, en definitiva.
Mientras, el papa Francisco, durante en la Vigilia Pascual de este año 2014, habló de poder encender el fuego para cada día, y llevar calor y luz a hermanos y hermanas. “Con esta chispa se enciende una alegría humilde, una alegría que no ofende el dolor y la desesperación, una alegría buena y serena”, dijo el Cabeza de la Iglesia y agregó que Pascuas significaba «una cosa muy hermosa, sacar una energía nueva de las raíces de nuestra fe».
Ojalá se entienda de una vez por todas que el verdadero sentido del disfrute y la paz que encierran estos días…
De regresos y llantos
LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||
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