“Unidad de criterios no significa servidumbre de opinión”, escribió el Maestro, y si bien diferir enriquece los sentidos del diálogo, aun opuestos, esto no significa que haya que recurrir a actos violentos que agudicen la situación del país.
El cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez entiende que la decisión del presidente Danilo Medina de observar la ley que convertiría a Loma Miranda en parque nacional debe ser respetada, “diga quien diga lo contrario”.
En general, las reacciones a favor y en contra de la medida no se hicieron esperar tras la decisión del Presidente; pero llamar a la desobediencia civil e incentivar actos violentos y protestas mal llevadas no ayuda en este ni en ningún asunto contradictorio de la nación.
Se imponen estudios más profundos, tal y como han aconsejado algunas voces, comisiones autorizadas en el terreno para determinar si es factible, viable o no la explotación minera de la zona en algunos de los límites y no arbitrariamente, como también otros plantean.
Tampoco se puede exigir que se acallen las opiniones de quienes consideran que no fue satisfactoria la observación de Medina y que esto, claro está, “le mella la popularidad que ha ido acumulando durante sus dos primeros años de gobierno”.
No solo la Iglesia Católica está dividida. La población se expresa de acuerdo a sus posibilidades y alcance. El propio presidente Danilo Medina dijo que respeta a quienes no comparten su decisión.
El problema está en quienes aprovechan el dilema como caldo de cultivo y aparecen ahora como abanderados de la explotación de esta reserva natural o en contra, según sus propios intereses.
Sin violencias, con reflexiones y mucho respeto, las cuestiones, aun las más peliagudas como estas, deben tener un camino de solución no de agudización del orden social que ya bastante alterado anda.
Respeto, reflexión y no violencia
LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||
Story
Page