Que el crimen organizado se haya incrustado en los estamentos de poder del país y facilitado su vínculo con la impunidad y la corrupción, es una grave denuncia realizada por tres figuras importantes de la vida nacional, quienes se han mostrado preocupados por la situación, la cual –según ellos-, está a punto de salirse de control.
La antropóloga social Tahira Vargas, el politólogo Daniel Pou y el jurista Servio Tulio Castaños, coincidieron en decir que ese mal debe ser trabajado y erradicado, y así se evitaría que la corrupción cale en todas las jerarquías del Estado: legislativa, judicial y ejecutiva.
Las autoridades deben frenar el fortalecimiento de las estructuras de crimen, las cuales están presentes a lo largo y ancho del territorio nacional, a través de la impunidad que tiene “esta gente que están desempeñando funciones de poder”.
Se necesita, además, una sociedad en donde todos los sectores sociales apunten a un cambio en las relaciones y en la que las personas se encaminen hacia una cultura de paz. Eso podría ser la mirada hacia el futuro de lo que debe implantarse dentro de la seguridad ciudadana.
“Estoy de acuerdo con que hay que desarmar a la población civil, acción para lo cual se necesita trabajar una cultura de confianza, que la gente crea que no necesita un arma para estar seguro”, sostuvo Tahira Vargas.
El Estado debe diseñar políticas públicas claras dirigidas a erradicar las prácticas de corrupción, fortalecer el sistema de justicia y la seguridad ciudadana, solo así el crimen organizado dejará de utiliza el territorio dominicano para lavar dinero y como puente para sus propósito ilícitos.
Crimen organizado, muy grave
LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||
Story
Page