El papa Francisco llamó a multiplicar la ternura entre los seres humanos y el año casi culmina con llamados de paz y solidaridad, que más parecen un gemido salido de lo más profundo del universo, donde tanta gente clama porque se les mire, se les incluya y se les tenga en cuenta.
Desde el “País de las Sombras Largas”, los esquimales anuncian que se visibilizan cambios demasiado evidentes en el planeta. Ellos que observan con detenimiento “las señales” de la naturaleza, coinciden en afirmar que algo está cambiando, hasta en el movimiento de rotación terrestre y la salida del astro rey…los días pueden acortarse, predicen…
Mientras, El Mundo publica un titular catastrófico y explícito: “El mundo se acaba en 2014” y amplía que “tal vez acababa para los mayas el pasado 21 de diciembre, pero para los afganos finaliza en 2014. En las televisiones locales se suceden los chistes sobre ese año como si, tras la retirada del grueso de las tropas internacionales de Afganistán, ya no quedara nada más. Tan sólo un enorme agujero negro de incertidumbre, en que nadie puede predecir qué ocurrirá”.
Para el longevo periódico, el Gobierno norteamericano “está controlado en parte por señores de la guerra cuyo currículum pone los pelos de punta. Informes de Amnistía Internacional y Human Rights Watch dan buena cuenta de ello…”.
De todos modos, son múltiples las voces que exigen paz y la Madre Tierra implora que se le atienda y cuide, no con metrallas, sino con amor y verdor que nutra los caminos por donde deambulan hombres, mujeres, niñas y niños…“Hay que comenzar bien 2015, para terminar bien… Agarrados de la mano del Señor…No hay otra”, escriben desde diferentes partes del orbe y en República Dominicana se suman coros…
Movidos días finales
LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||
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