¿Podrá la voz de nuestros pensamientos ser tan fuerte como para cambiar nuestra silueta? Según la psicóloga Ellen Langer, nuestra actitud mental podría influir en los efectos del envejecimiento y contribuir a mejorar la salud. Conoce más sobre esta interesante teoría.
Más allá del cuerpo
Tras más de cuatro décadas de estudios, Langer, profesora de psicología de la Universidad de Harvard, reveló que la predisposición mental podría contribuir a revertir los efectos de la vejez en el cuerpo y a mejorar la salud física, tal como recopila su sitio web.
Al comienzo de su carrera en Harvard, Langer realizó una investigación en la cual reunió a hombres de entre 70 y 80 años, y los trasladó a un viejo monasterio en New Hampshire, reseña la revista de la universidad mencionada. Llevó primero a un grupo y les pidió que actuaran como si fueran jóvenes otra vez, de vuelta en los años 50.
A los integrantes del segundo grupo les solicitó únicamente que recordaran sucesos de esa época, pero “permaneciendo” en el presente. La investigadora ambientó el lugar para recrear la atmósfera retro: periódicos y revistas del momento, televisión en blanco y negro, y una radio vintage integraron la puesta en escena.
Resultados sorprendentes
Al finalizar el experimento, todos los participantes se mostraban más fuertes y flexibles que al comienzo, y muchas variables físicas –altura, peso, manera de caminar, postura, audición y vista– presentaban mejorías. Los resultados más sorprendentes se observaron en aquellos que habían “fingido” ser más jóvenes, señala la revista antes mencionada.
El poder de la mente
“A donde lleves tu mente, tu cuerpo la seguirá”, declaró la experta en una conferencia, frase que refleja en gran medida su teoría. “No es nuestro estado físico lo que nos limita, sino nuestra percepción sobre nuestros propios límites”, explicó en el evento, tal como recopila la publicación deHarvard.
En otro de sus experimentos, Langer habló con 84 trabajadores de un hotel, que declararon no haber hecho nunca ejercicio, si bien se pasaban sus días de pie, limpiando habitaciones y empujando carros. De acuerdo con la revista de Harvard, la especialista les dijo a la mitad de ellos que su trabajo ERA ejercicio. Sorprendentemente, un mes después, este grupo adelgazó, bajó su presión arterial y redujo la relación proporcional entre cintura y cadera, sin haber cambiado su rutina alimentaria, ni laboral.
Y tú, ¿piensas que tu mente podría ser una aliada para verte mejor? Recuerda siempre consultar a un médico si quieres perder peso.
