El pastor de la Iglesia Evangélica Integral, Arismendy Debord López, dijo este viernes que los efectos de la decisión de la Suprema Corte de los Estados Unidos, de legalizar el matrimonio homosexual, podría repercutir en naciones del continente, como la República Dominicana, que están acostumbradas a imitar los ejemplos de ese país.
El también abogado y psicólogo Debord López expresó que en el caso de República Dominicana la situación es aún más difícil, porque “las autoridades se han mostrado complacientes, permisivas e informales en cuanto a la defensa de nuestra Constitución, contra elementos extraños, perturbadores y conculcadores de sus derechos fundamentales”.
Puso como ejemplo que el embajador de los Estados Unidos, acreditado en el país, James “Wally” Brewster, “se comporta como todo un primer ministro, ya que opina de todo, interviene en los asuntos internos, corrige a políticos, y hasta habla abiertamente de que fue enviado por el presidente Barak Obama a nuestro país, con la premeditada misión de imponer el matrimonio homosexual, sin que nadie opine al respecto”.
“Él sabe que en la República Dominicana no está permitido el matrimonio entre personas del mismo sexo, y aun así sigue pavoneándose por todas partes”, indicó.
Agregó que si bien es obvio que, en su vida privada, el embajador tiene derecho a que se le respete su intimidad, no es menos cierto, que debe desistir de toda defensa pública de derechos que no le compete a él defender, ya que no forman parte de sus funciones diplomáticas.
Manifestó “he sometido un recurso de revisión constitucional de una acción de amparo por ante el Tribunal Constitucional, con las finalidades de frenar las ya conocidas aspiraciones del embajador de modificar el Artículo 55 de nuestra Constitución, para imponer el matrimonio entre personas del mimos sexo”.
Debord López recordó al presidente Danilo Medina que en su toma de posesión juró cumplir y hacer cumplir la Constitución y las leyes.
Con relación a la sentencia del tribunal norteamericano, con una cerrada votación de cinco votos a favor y cuatro en contra, Debord López, señaló que es un rudo golpe a los principios cristianos, al concepto tradicional de familia y a las buenas costumbres.
Indicó que esa sentencia es también un elemento de presión a países como el nuestro, “débiles en sus instituciones jurídicas”.
“Esa sentencia contranatural y anticristiana es un indicador del estado de depravación moral, perversión, decadencia irreversible, apostasía y alejamiento de Dios, en que vive inmersa una parte considerable de la sociedad estadounidense”, sostuvo Debord López.
Consideró que la única vía de escape para los Estados Unidos de América es el arrepentimiento y su humillación delante de Dios, así como retractarse de sus caminos y volver a la senda antigua.
Afirman aprobación EEUU matrimonio homosexual repercutirá RD
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