En estos días se habla de los más de 400 suicidios que han tenido lugar en el país y especialistas señalan el concepto de “contagio” y el riesgo de que los reportes periodísticos validen en sus titulares e historias una comunicación que inconscientemente ofrece “una ruta a seguir para llegar al clímax de esta muertes”, que producen más bajas que las guerras y homicidios.
Si de estadísticas hablamos, en 2014, hubo 557, de ellos la mayoría hombres; o sea, de cada mujer, seis o siete hombres se quitan la vida. Hay quienes plantean que las féminas asumen las contradicciones y problemas de la existencia con mayor valentía. Quizás se trate de la manera en que desde hace muchos siglos, el desarrollo socio, político y económico ha implicado esta fortaleza.
Pero, el análisis es multifactorial e indiscutiblemente, las redes sociales juegan un papel no siempre positivo, pues la multiplicación de una nota mal redactada y con un enfoque distorsionado circula con mayor presteza y deja secuelas…
Lindas e inconfundibles las frases de Facundo Cabral, que vienen a cuento, porque, y cito textual: “…que no te confundan unos pocos homicidas y suicidas, el bien es mayoría pero no se nota porque es silencioso. Una bomba hace más ruido que una caricia, pero por cada bomba que destruye hay millones de caricias que alimentan a la vida (…) No estás deprimido, estás desocupado, ayuda al niño que te necesita, ese niño será socio de tu hijo, ayuda a los viejos, y los jóvenes te ayudarán cuando lo seas; además, el servicio es una felicidad segura como gozar a la naturaleza y cuidarla para el que vendrá; da sin medidas y te darán sin medidas;ama hasta convertirte en lo amado, más aún hasta convertirte en el mismísimo amor…No estás deprimido, estás distraído, de la vida que te puebla…”.
No al contagio…»estás distraído»
LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||
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