Cansada ante la ola de criminalidad que se vive en la República Dominicana y la poca eficiencia de las autoridades competentes para frenar esta situación, la ciudadanía ha decidido hacer justicia con sus propias manos y vengar a los que sin ningún miramiento les arrebatan lo que con tanto esfuerzo han logrado.
Aunque este método es rechazado por las leyes dominicanas y por la mayoría de la población, durante el 2015 muchos delincuentes fueron víctimas de linchamientos por moradores de los barrios donde realizaron sus robos o atracos.
Uno de los casos que conmovió al país fue la ejecución de un adolescente de 17 años, acusado, presuntamente, de robar una motocicleta en el barrio Kilombo de Villa Mella.
Tras capturarlo, sus victimarios lo amarraron y golpearon salvajemente, en presencia de numerosas personas. No conformes con eso, le rociaron gasolina y le prendieron fuego.
Asimismo, en Bonao fue quemado vivo por residentes de la comunidad del 101, del Distrito Jayaco- La Ceiba, el joven José Miguel Perdomo Faña, de 22 años, por alegadamente asaltar y herir de bala a un joven de 19 años.
Esta historia se repitió en San Cristóbal, donde una turba de campesinos enardecidos mató a uno de tres presuntos delincuentes en el paraje de Boruga, perteneciente al Distrito Municipal de Hato Damas, en la zona norte de esa localidad.
De igual forma, en Dajabón fue ultimado a golpes con palos, piedras y otros objetos, un haitiano que fue sorprendido robando en una vivienda. El extranjero fue rescatado por la Policía y llevado al hospital Matías Ramón Mella, donde falleció.
En San Francisco de Macorís atraparon a un ladrón y le propinaron varios disparos, así como múltiples golpes a un joven, quien en sus últimas palabras logró decir que llamaran a su mamá.
Se recuerda que en Santiago una multitud ajustició a Juan Hernández, apodado El Mello o El Chino, de 24 años, en el sector La Lotería al sorprenderlo cuando atracaba a una mujer. Murió a causa de múltiples heridas punzo-cortantes, según certificó la médico actuante.
Estos son algunos de los casos que sucedieron en lo que va de año, por lo que se espera que en el 2016 la justicia dominicana y los organismos policiales trabajen mancomunados para que la criminalidad no lleve a la población a convertirse de víctima a asesina.
Ola de robos lleva ciudadanía tomar justicia con las manos
LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||
Story
Page