Los taxistas efectúan hoy su segunda jornada de huelga en Francia para protestar contra lo que consideran una competencia desleal de las empresas de vehículos particulares con chofer.
En concreto, atribuyen su manifestación a la competencia ilícita de plataformas -como la ofrecida por la empresa estadounidense Uber-, que convierten a conductores particulares en choferes.
Dichas plataformas permiten reservar a través de Internet un vehículo con conductor a una tarifa significativamente inferior a la que cobran los profesionales con una licencia.
La movilización de los conductores comenzó desde las primeras horas de la mañana del martes en París y en las sureñas ciudades de Marsella y Toulouse, en las que bloquearon las vías.
Al menos 20 personas fueron detenidas tras los incidentes violentos ocurridos ayer durante la huelga en la que participaron choferes de otros países europeos en señal de apoyo.
Dos manifestantes resultaron heridos cerca del aeropuerto de Orly (a unos 14 kilómetros al sur de la capital francesa), luego de que una camioneta de un hotel les atropellara para tratar de superar el bloqueo de vías, reportaron medios locales de prensa.
Según fuentes policiales, las personas fueron detenidas por violencia voluntaria, tenencia de armas e incendio voluntario.
Tras lo sucedido, el primer ministro Manuel Valls recibió a los representantes de los taxistas.
Al término de la reunión, Valls anunció la apertura de una concertación y el nombramiento de un mediador para solucionar la crisis.
Por su parte, los taxistas decidieron mantener la huelga este miércoles en la nación gala.
