Oklahoma City.- Draymond Green llegó muy sonriente a la práctica de sus Golden State Warriors este lunes, como si nada hubiera provocado la noche anterior.
La patada de Green ha resultado en mucho más que la falta flagrante que marcaron en el Juego 3 de las Finales de Conferencia Oeste, que ganó el Oklahoma City Thunder sobre los Golden State Warriors.
Resultó ya en un intercambio de ataques verbales y bromas entre ambos equipos, pero sobre todo echó más leña al tradicional fuego de la tribuna del Thunder en Oklahoma City.
Ahora, Green y el resto de los Warriors esperan que no resulte también en la suspensión al menos de un partido, en la serie que pierden 1-2 de manera momentánea.
«La manera en que todo mundo está soplando hacia arriba, me hace pensar que voy a ser suspendido», dijo Green este lunes con una gran sonrisa, sentado frente a media centena de reporteros. «Eso ni siquiera debería ser considerado porque yo sé que no estaba tratando de patearlo».
La falta sucedió en el segundo periodo del partido, cuando Green pateó en medio de las piernas a Steven Adams, quien acababa de cometerle una falta.
En principio no se marcó nada; hasta que los árbitros vieron que Adams estaba en el piso con evidente dolor, decidieron ir a la repetición, que resultó en una falta flagrante.
Adams ha rechazado asegurar que fue intencional. Pero su compañero Russell Westbrook dijo cree que así fue.
«¿Russell dijo que lo hice a propósito?», cuestionó Green. «Él es parte de un grupo de súper estrellas que comenzó toda esta actuación en la NBA».
Par de horas más tarde, Westbrook negó en el entrenamiento del Thunder tratar de inventar faltas o influir en las decisiones arbitrales.
Dijo que nunca había sido multado por inventar faltas desde que juega en la NBA y que la liga debe frenar a Green, quien ha pateado rivales en reiteradas ocasiones, además de que por momentos abusa del juego físico.
«Sólo quiere quitarse el calor de encima», señaló Westbrook.
El guardia del Thunder también negó que hubiera pateado al principio del partido a Green y que sólo intenta distraer al equipo que vive buen momento.
«Yo no tengo ningún amigo en este tiempo del año sobre la cancha», afirmó. «Mi único amigo es el basquetbol».
El entrenador de los Warriors, Steve Kerr, reiteró igual que la noche anterior que los árbitros ni siquiera debieron marcar falta flagrante y que la liga no debería suspender a su delantero.
También reconoció que Green debería concentrarse más en su juego que en involucrarse en situaciones extra cancha o en alegatos secundarios.
«Claro que en caso de algo suceda (suspensión) nosotros como staff de entrenadores tendremos que ajustar», dijo Kerr. «Hay que estar preparados para todo».
Adams rechazó estar interesado en una posible disculpa, pero adelantó que quizá deba ir mejor preparado para el siguiente partido.
«Probablemente es algo que debería considerar debido a la consistencia de sus golpes.», respondió Adams sonriente, a la pregunta sobre si pedirá equipamiento especial para proteger sus partes blandas en caso de otra patada.
Para Adams, una posible suspensión de Green es intrascendente.
«Creo que podemos vencerlos con o sin Draymond Green», aseguró.
Guerra entre Golden State y Oklahoma se sale de la cancha
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