Cifras punzantes

LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||

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Por cada feminicidio cometido en la República Dominicana quedan huérfanos un promedio de 2.5 niños y adolescentes, lo que significa unos  300 por año, según datos de la Procuraduría General. En lo que va de año han muerto 58 mujeres a manos de sus actuales o exparejas, en la mayoría de estos hechos han quedado niñas y niños sin padres, pues en muchos casos los victimarios se quitan la vida después del crimen y en los otros, van a prisión. De igual manera los menores sufren, sufren, sufren…
 
La procuradora fiscal de Santo Domingo, Olga Diná, informó que apenas un 2% de los casos de violencia de género se judicializa. De manera que de una cifra aproximada de 60 mil mujeres violentadas, solo 15 mil buscan protección.
 
Y entonces sigue el círculo de la violencia y la ruta crítica se agudiza, porque muchas de esas mujeres víctimas de violencia, deben disponer de dinero y tiempo para efectuar las denuncias,  y a veces hasta las despiden por tales ausencias de sus centros laborales, por lo que es más fácil dejar todo y seguir siendo violentada, lo que puede concluir con la muerte.
 
Desmontar ideas de superioridad entre hombres y mujeres, requiere “revolucionar” con intensidad las mentes; educar desde las escuelas, las familias, esas mismas que han aprendido una cultura patriarcal y que tanto cuesta transformar.
 
Es un camino difícil, escabroso y pleno de dificultades que hasta ahora no se han podido vencer. Hay que remover las raíces, incluir a toda la sociedad, instituciones; establecer estrategias a nivel sectorial; pero sobre todo desde una política de Estado.
 
Mujeres y hombres llenos de responsabilidad y luchadores por salvaguardar los derechos humanos de la mujer dominicana hablan de lograr que la sociedad presione para que el Estado ceda, porque la violencia sigue siendo estructural en las relaciones sociales y resulta imprescindible la transversalización del tema y el requerimiento de que el Estado asuma su papel rector en todo este proceso.