LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||
De Víctor Víctor. Oye comoe la cosa (a ritmo de bachata): cerraron todos los programas de desarrollo cultural en las provincias (absolutamente todos); cerraron la escuela para merengueros típicos Ñico Lora, en Santiago, dejando en el aire a güireros, tamboreros y acordeonistas; cancelaron a todos los especialistas que olían al anterior tren administrativo del Ministerio. Esto es ni más ni menos que una espectacular vendetta, con la que hace historia en la novel burocracia cultural, que entona su bolero de cabecera (he dicho bolero): Sólo cenizas hallarás (si las cosa siguen como van).