Pekín planea reducir el consumo de carbón en otro 30 por ciento en 2017 como parte de sus esfuerzos para combatir la contaminación del aire, dijo la agencia de noticias oficial Xinhua, citando al alcalde de la capital de China.
Pekín ha prometido implementar medidas «extraordinarias» este año a fin de disminuir el smog que surge de la congestión del tráfico y el fuerte uso de carbón en la generación de energía.
«Básicamente trataremos de realizar un uso nulo de carbón en seis distritos mayores y en las áreas planas del sur de Pekín este año», dijo el alcalde Cai Qi según fue citado, agregando que Pekín también eliminará las calderas pequeñas que funcionan con carbón.
Los nuevos recortes bajarán el uso de carbón en la ciudad a menos de 7 millones de toneladas en 2017, dijo Cai.
Pekín originalmente apuntaba a bajar el consumo de carbón a menos de 10 millones de toneladas este año desde alrededor de 22 millones en 2013 y ya ha cerrado grandes estaciones de energía que funcionaban a carbón.
Las autoridades compensaron el suministro faltante con importaciones de energía de provincias vecinas a través de la red, planteando temores de que la capital esté exportando su contaminación a las regiones adyacentes.
Cai dijo también que Pekín retirará 300.000 vehículos obsoletos de las calles este año para elevar los estándares del combustible y promover los autos de nuevas energías.
El tráfico pesado es responsable de alrededor de un tercio de las emisiones totales de Pekín, de partículas dañinas conocidas como PM2.5, de acuerdo con el ministerio de protección ambiental.
Pekín reducirá 30% en uso de carbón en 2017 para combatir smog
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