La directora del Servicio Regional de Salud Metropolitano (SRSM), doctora Mirna Font-Frías, sostuvo este viernes que la vocación es uno de los pilares de la medicina para ofrecer un buen servicio a los enfermos, porque conlleva dedicar la vida en la asistencia, educación y prevención, así como acompañarlos en los momentos que se sienten desolados, abandonados, confundidos y muchas veces denigrados.
Nosotros como representante del sector salud estamos sumergidos en la transformación del sistema, poniendo en práctica los lineamientos de nuestro presidente Danilo Medina, de nuestro órgano rector el Ministerio de Salud Pública y del Servicio Nacional de Salud, para brindar a los enfermos un trato con calidez, calidad y humanización, manifestó Font Frías al pronunciar las palabras de clausura en la misa oficiada en la Catedral Primada de América por el Arzobispo Metropolitano de Santo Domingo, monseñor Francisco Ozoria Acosta, con motivo a la Vigésima Quinta Jornada Mundial del Enfermo.
Sostuvo que trabajan encarecidamente para poner en marcha el modelo de Primer Nivel de Atención, el cual será la puerta de entrada a los usuarios y donde estarán involucrados los médicos, enfermeras, coordinadores, promotores y los comunitarios, laborando en equipo para dar una asistencia enfocada en la prevención.
Al concluir sus palabras, la doctora Font-Frías agradeció el llamado de la Pastoral de la Salud de la Arquidiócesis de Santo Domingo para estrechar lazos de hermandad entre ambas instituciones, con el propósito de hacer posible un país más sano, humano y justo.
La Jornada Mundial del Enfermo fue instituida en el año 1992, por el papa Juan Pablo II, para sensibilizar a la sociedad y asegurar mejor asistencia a los que carecen de salud.
