Un marcapasos inalámbrico sin batería que puede implantarse directamente en el corazón de un paciente es el resultado del trabajo conjunto de expertos de la Universidad Rice en Houston (Texas) y el Instituto del Corazón de Texas, ambas entidades en Estados Unidos.
El marcapasos, diseñado por Aydin Babakhani de la citada universidad, recolecta energía inalámbricamente a partir de las emisiones de radiofrecuencia enviadas por una unidad de batería externa.
En el prototipo ahora presentado, el emisor de energía inalámbrico puede hacer bien su trabajo alejado a hasta varios centímetros de distancia.
Los marcapasos utilizan señales eléctricas para hacer que el corazón mantenga un ritmo constante. Con la tecnología convencional no se implantan directamente en el corazón sino que se sitúan a una distancia prudencial de él, donde resulte lo menos aparatoso posible, sin merma de la funcionalidad, el reemplazo periódico de sus baterías por los cirujanos. Las señales eléctricas del marcapasos se transmiten al corazón a través de unos cables.
Esta configuración acarrea algunos problemas, por las complicaciones que aparecen debido a los cables, como sangrado e infección. El nuevo prototipo de marcapasos inalámbrico reduce estos riesgos al no requerir esos cables.
Algunos de los componentes principales internos del marcapasos sin batería. De arriba abajo, condensador de almacenamiento, chip CMOS y conmutador PMOS.
El marcapasos puede ser insertado en el corazón y energizado a través de un conjunto de baterías situado fuera del cuerpo. (Imagen: Rice Integrated Systems and Circuits/Rice University).
Otros marcapasos sin cables, de invención reciente, también mitigan algunas de estas complicaciones, pero sus características los limitan a una sola cavidad cardiaca y no pueden marcar el ritmo de forma biventricular. En cambio, se pueden implantar directamente microchips sin baterías ni cables, energizados inalámbricamente, para marcar el ritmo de múltiples puntos, dentro o fuera del corazón.