Nueva York.- El aeropuerto doméstico La Guardia, por donde entran y salen más de 300 mil vuelos y lo utilizan unos 30 millones de pasajeros al año, entre ellos miles de dominicanos, sufrió una falsa alarma de bomba el pasado fin de semana causando el cierre de la terminal B y varios puestos de control por horas que afectó a criollos que se proponían salir y llegar por dicha terminal.
Así lo manifestaron los dominicanos Alicia Contreras, Juana de Ortíz, José Manuel Octavio y Edwin Castro, quienes fueron a llevar y recoger parientes por dicha terminal a primera hora de la mañana del pasado sábado.
“Tuvimos que salir del aeropuerto, evacuaron a todo el mundo de la terminal, y después de varias horas fue que vinimos a recoger nuestros parientes y otros criollos pudieron volar», indicó Castro.
El asiático John Park, de 70 años, se enfureció cuando un empleado de la aerolínea Spirit Airlines le manifestó que debía pagar 50 dólares por la maleta que llevaba, negándose a pagar y entablándose una agria discusión. Luego quiso dejar abandonado el equipaje y le dijeron que no, entonces el “encojonado” hombre expresó “hay una bomba ahí dentro”, dijeron las autoridades.
Se armó un corre corre y la voz de alarma fue dada a la Policía, que se presentó en fracciones de segundo a la escena, arrestando a Park e iniciando una minuciosa revisión, aunque luego se determinó que se trató una falsa alarma.
Park fue arrestado y acusado de un delito grave por haber cometido una amenaza terrorista. Fue liberado sin fianza.
La semana pasada, en el Centro Comercial de Walmart en la ciudad de Bayonne, Nueva Jersey, también hubo una falsa alarma de bomba.
A parte de la terminal B (Central Terminal Buidling), dicho aeropuerto posee la A (Marine Air Terminal) C y D conectadas entre sí, dos pistas de iguales dimensiones 2,134 x 46 metros; no dispone de aduanas, inmigración, ni se permiten vuelos de entrada ni salida que excedan los 2,400 kilómetros, excepto los sábados o si son vuelos procedente de Denver.