Los políticos millonarios los veo en una etapa aterradora de la vida, la inseguridad los acorrala desprovistos del conocimiento de la paz espiritual que viene del que nada tiene, alejado del materialismo corrupto.
Lo material (dinero) lo domina y no entiende en absoluto la existencia de lo espiritual, la ley del desapego.
El señor expresidente de Uruguay Pepe Mujica entregó al dominicano su ley espiritual, no tiene carga, lo vimos feliz, tranquilo sin espalderos, nada de temor, no tiene la carga de lo mal hecho, esos teneres ilegales inocultables, por eso la sencillez, pureza, nada de enfermedades síquicas acusatorias en su sencillo vivir. El señor Don Pepe Mujica que vi en la TV entrevistado por un joven en la universidad, es un retrato nítido, natural que no tiene que deshacerse de todas las tres etapas del apoyo al mundo material: el descuido a la vida espiritual y el concepto de vicio que surge de la frustración de la vida. Seguro está libre de esas tres etapas del concepto material de la vida, está por completo unido a Dios.
Nuestro invitado de hoy Benedicto XVI “Cuando más cerca está el hombre de Dios, tanto más cerca está de los hombres”. Así observé al señor Pepe Mujica.
Consérvese bueno
El autor es vicealmirante retirado de la Armada Dominicana