El Sevilla ha vencido 1-2 al Manchester United, en un partido que pasará al recuerdo de la hinchada rojiblanca, y que permite al equipo hispalense clasificarse por primera vez en su historia para los cuartos de final de la Liga de Campeones.
Mourinho sorprendió con su alineación, en la que fue titular Fellaini, mientras que Pogba -que es cierto que llegaba tocado- o Mata se quedaron en el banquillo.
La intención del portugués, desde el primer momento, fue encontrar a Fellaini con envíos muy directos, y que el belga prolongase para que Alexis o Rashford, los extremos, recibieran en las esquinas del área. Fue una jugada que se repitió mucho, y de hecho hubiera puesto en bastantes apuros al Sevilla de no haber sido por el descomunal primer tiempo de N’Zonzi y Lenglet, muy fuertes en defensa.
A eso se sumó que el Sevilla logró desplegarse en varias ocasiones, sobre todo cuando Sarabia o Muriel fueron a buscar los lados de Matic. Mou volvió a plantear marcas al hombre (Lingard con Banega, Fellaini con N’Zonzi y Matic con Vázquez), de forma que otros podían aprovechar esa recepción entre líneas. Eso provocó que, en el primer tiempo, el Sevilla diese mejor sensación con pelota, pero lo cierto es que el Manchester United fue el que pareció estar más cerca del gol.
En el minuto 1, Lukaku se sacó un remate que se marchó alto, al golpear con la derecha, su pierna mala, y aunque Correa, con un cabezazo en un córner, y Muriel, con un disparo demasiado cruzado, también le dieron alguna opción al Sevilla, Rashford o Alexis recibían mucho la pelota en las esquinas del área, y aunque no estuvieron acertados, merodearon la meta de un Sergio Rico que sacó una buena mano a un remate cercano de Fellaini tras hacer éste una pared con Alexis en el minuto 37.
El arranque de segunda parte fue de nuevo con un Manchester United muy intenso y agresivo, y en el minuto 51 los red devils encontraron una gran situación de gol, cuando Lingard se sacó un golpeo cruzado que exigió a Rico a hacer un paradón. La agresividad local permitió al Sevilla a tener más espacio, y primero un fallo en el control de Correa y luego una buena acción defensiva de Bailly permitió que el encuentro siguiera 0-0.
Mourinho intentó meter algo más de ritmo al ataque de su equipo con la entrada de Pogba por Fellaini, y el francés se sacó un buen disparo de zurda que se marchó fuera por poco en el minuto 72. Montella respondió con la entrada de Ben Yedder por Muriel en el minuto 73, y el francés hizo explotar a la grada visitante instantes después, cuando recibió un gran balón de Sarabia para mandar la pelota a la red con un poderoso remate de diestra, tras hacer un gran control orientado.
El tanto dejó totalmente tocado al equipo local, que recibió el 0-2 en el minuto 77 en un córner, en un remate que sorprendió a De Gea. Y de nuevo fue gracias a Ben Yedder, que consiguió cabecear en el segundo palo ese saque de esquina, y aunque el meta español tocó la pelota, ésta se acabó colando muy despacio en la portería, para júbilo de la hinchada desplazada.
Eso sí, el Sevilla tuvo algunos momentos de sufrimiento. Mourinho fue con todo dando entrada a Martial y Mata, y el Manchester United logró recortar distancias en el minuto 82 gracias a Lukaku, y los red devils lo siguieron intentando. Se pidió cesión de Kjaer a Rico, y Rashford cabeceó fuera por poco en el minuto 85. Pero a partir de ahí, los cambios de Montella cortaron el ritmo del encuentro, y a los red devils no les llegó a encontrar los dos goles necesarios.
ROMA 2, SHAKHTAR DONETSK 2
Un gol del bosnio Edin Dzeko le dio este martes el triunfo 1-0 al Roma ante el Shakhtar Donetsk, lo que permitió al conjunto italiano remontar el 1-2 de la ida y sellar el pase a los cuartos de final de la Champions League.
El gol de Dzeko, sumado al que consiguió el turco Cengiz Under en tierras ucranianas en la ida, marcó la diferencia en esta eliminatoria y lanzó a un Roma que volverá a disputar un cuarto de final de la Liga de Campeones diez años después de la última vez.
Tuvieron que sufrir hasta el final los romanos, ante un Shakhtar que atacó con gran compromiso y que llegó a lanzar un centro peligroso desde la banda izquierda tras una gran jugada personal de Taison, aunque ninguno de sus compañeros logró rematarlo.
Así, tras cuatro minutos de tiempo añadido, el Roma pudo celebrar un triunfo que le permitirá volver a disputar un cuarto de final diez años después de la última vez.