El politólogo Fredy Ángel Castro sugirió este lunes la creación de un fiscal anticorrupción que no esté sujeto a ser removido por el Presidente de la República, a fin de evitar que sobre fiscales que han tenido una labor exitosa, se generen situaciones para sacarlos de los procesos políticos y administración de justicia, como es el caso de la fiscal del Distrito Nacional, Yeny Berenice Reynoso.
Castro sostuvo que el actual sistema de justicia promueve sacar los fiscales más eficiente y transparente, para entonces agregar procesos que técnicamente pueden estar bien abalados, pero no en correspondencia con la mejor administración de justicia.
Sobre la Ley de Partidos Políticos cree que el Movimiento Marcha Verde perdió una oportunidad para trasparentar e impulsar aún más el proceso de lo que pudo ser la reforma de esta legislación.
Al comparecer en el programa El Día, por Telesistema, canal 11, Castro apuntó que si mediante la Ley de Partidos no se controla el narcotráfico y el financiamiento ilícito, entonces se tiene un elemento circunstancial de corrupción, que es un ámbito en el que los partidos políticos son muy sensibles.
Dijo que la Marcha Verde debió asumir una mayor fiscalización de lo que se estaba haciendo en el Congreso con la Ley de Partidos.
Explicó que al examinar la Ley se encuentran muchas debilidades y detalló que contiene un decálogo de multas administrativas, “o sea muchas cargas de multas administrativas, mientras los tipos penales son los tradicionales como el robo y otros”.
Precisó que el propio financiamiento ilícito en el término de la campaña, sobre todo el que tiene que ver con el narcotráfico, no deja claramente establecido un régimen de sanciones.
“Entonces ahí se pudo hacer un mayor tipo de control social. Ojalá y se hagan para las futuras reformas que se tienen en mente”, indicó.
Señaló que el caso de la Marcha Verde está replanteando a los actores políticos, y está mandando un reto social a los políticos, porque en lo adelante ningún partidos ni dirigentes comunitario ni empresarial puede obviar los niveles de ascenso y de control social que tiene este movimiento respecto a las situaciones políticas.
Finalmente, Castro precisó que si no es por la acciones de la Marcha Verde, el caso Odebrecht hubiera sido engavetado hace mucho tiempo, con un archivo general de los expedientes, lo que se haría en función del acuerdo que hizo el Estado con la compañía brasileña.