De mi bitácora en Taiwán estuve gran parte de la noche con el Budismo, copie este texto sacado el Budismo antiguo.
“En verdad es uno mismo que se destruye, es uno mismo que se mancilla o ensucia. Es uno mismo quien evita el mal o quien se depura. La fuerza y la limpieza mental dependen de uno. Son personales y nadie puede purificar a otro”.
Los apegos obnubilan y reducen la capacidad cognitiva. Mientras que el desapego genera paz y ayuda a desatar los nudos emocionales que impiden purezas libremente. Unos te humillan, el otro te saca.
El apego es una vinculación metal y emocional (generalmente obsesiva) a objetos, personas, actividades, ideas o sentimientos, originada en la creencia irracional de que ese vínculo proveerá de manera única y permanente placer, seguridad o autorrealización. Realmente lo que define el apego no es tanto el deseo si no la incapacidad de renunciar a él cuándo debe hacerse.
Desapego, despreocupación y ausencia de ansiedad, no importa conque o con quien sea el vínculo. El desapego se fundamenta en una filosofía del desprendimiento, que no es otra cosa que un intento por ser psicológicamente libres.
Si lo tengo bien, si no también ¡tan fácil y tan fácil!
Separación de lo que nos atrapa irracionalmente o no necesitamos y creemos necesitar. Salir de lo que nos sobra, de lo que no le viene bien a nuestra vida.
¿Qué significa estar desapegado? Soltarse o desprenderse de la avidez, desistir de lo que nos lastima, emanarse o liberarse del deseo.
Malsano también disfrutan las cosas sabiendo que son transitorias y desarrollar un estilo de vida fundamental en la independencia emocional (no posesión) si no establecemos vínculos obsesivos y ansiosos severos emocionales indiferentes.
De mi bitácora. En mis apuntes de Taiwán he conversado de un libro budista, esto fue escrito hacen más de dos mil años seiscientos años, este es un párrafo.
Aquel está satisfecho y no depende de nada, al no estar apegado al fruto de sus obras, aunque este comprometido en sus actos no necesita escolarizarse.
La clave del desapego la concibo, prohibida la esclavitud mental, además de la física.
Soy libre no he aceptado mis aceptares nada, absolutamente nada que trate de quitarme la capacidad de pensar y que yo deje de sentir, hacer lo que nos dé la gana. El apego es emocional.
El apego es una patología de la libertad que te quita hasta el último aliento de energía vital.
En Taiwán leí un poco del maestro Faisen Deshemaru, solo copie esto “Despertarse significa cambiar de valor”.
Hoy vamos a variar y los dejo con León Tolsti mi felicidad consiste en que se apreciar lo que tengo y no deseo con exceso lo que no tengo«.
Amable lector ¿Sabe cómo me siento bien conmigo mismo?
Sencillamente es liberación, es la gran auto aceptación. Estoy alejado de todo. Reina en mi interior el despojo. Vivo en satisfacción conmigo mismo.
Consérvense bueno.
El autor es vicealmirante retirado de la Armada Dominicana