Edwin Oviedo, empresario y máximo dirigente del fútbol peruano, fue puesto bajo “detención preliminar” por 15 días, dijo Chávez a la televisora local ATV.
De acuerdo a la fiscalía peruana, Oviedo era operador y financista de la organización criminal que ha sido denominada por la policía como “Los cuellos blancos del Puerto”, acusados de manejar la justicia a su antojo en diversos procesos judiciales para favorecer a litigantes a cambio de fuertes sumas de dinero o del intercambio de favores.
En julio, la prensa peruana empezó la difusión de una catarata de audios de interceptaciones telefónicas policiales que involucraron una investigación a narcotraficantes y escaló hasta un juez supremo. Generó un escándalo por corrupción que provocó luego que el presidente Martín Vizcarra anuncie un referendo para reformar el sistema judicial de Perú.
La fiscalía señala a Oviedo, de 47 años, de pagar viajes y viáticos de varios jueces importantes a la Copa Mundial de fútbol en Rusia. El objetivo era que los magistrados lo ayudaran después en otra investigación fiscal a la que Oviedo está sometido en una ciudad de la costa norte del Pacífico donde el dirigente está acusado de ordenar dos asesinatos de dirigentes sindicales en 2015, en medio de luchas empresariales por tomar la administración de una importante fábrica productora de azúcar.
En esta segunda investigación, otro fiscal contra el crimen organizado pidió que el dirigente deportivo sea encarcelado de forma preventiva por 24 meses. El juez que dirige este segundo caso anunciará su decisión el viernes.
Oviedo fue detenido en su casa de una zona rica de Lima y fotografías difundidas por la prensa local lo mostraban sentado en la sala de su domicilio rodeado de policías y de la fiscal que dirigió su arresto. Horas después, decenas de agentes también ingresaron al local de la Federación de Fútbol de Perú.
El dirigente detenido y la federación también se encuentran en el centro de la atención de la FIFA debido a que el parlamento dominado por la oposición busca modificar una ley que permitiría al estado supervisar las finanzas de la federación.
La FIFA advirtió en noviembre que, de aprobarse tal ley, podría suspender a la selección de Perú y a los clubes locales de futuros torneos internacionales.
Bajo la conducción de Oviedo, Perú se clasificó al Mundial de Rusia tras 36 años de ausencia del máximo evento futbolístico.
