Caracas, Venezuela.- El chavismo y la oposición, con sus principales dirigentes a la cabeza, midieron este martes sus fuerzas cuando se movilizaron en Caracas y otras ciudades de Venezuela con agendas opuestas y reclamos que se convierten en denuncias hacia el otro.
El presidente Nicolás Maduro, en el poder desde 2013, recibió en el centro de Caracas, asiento de los poderes públicos, a simpatizantes que marcharon para denunciar un presunto intento de golpe de Estado a su gestión y pedir que se respete la soberanía venezolana, que consideran amenazada por factores “imperiales”.
En tanto, un mar de banderas venezolanas y sonoros gritos contra el presidente Nicolás Maduro, decenas de miles de manifestantes se lanzaron también este martes a las calles del este de Caracas para tratar de quebrar el respaldo de los militares a la decisión del gobierno de no permitir la entrada de ayuda humanitaria al país.
“Aquí vamos a seguir hasta lograr la libertad de Venezuela”, dijo el jefe de la Asamblea Nacional y líder opositor Juan Guaidó, al asegurar ante la multitud que la oposición seguirá en las calles hasta lograr el cese de la “usurpación” del Ejecutivo por parte de Maduro. “El usurpador va a tener que irse sí o sí”, agregó.