ESPN.- El presidente de la Federación Italiana de Fútbol (FIGC), Gabriel Gavina, manifestó que el equipo de la Juventus no aceptaría el título de campeón de la Serie A si esta se cancela por la pandemia del coronavirus.
El equipo de Maurizio Sarri lidera la liga italiana, sólo un punto por delante de Lazio, con 12 partidos restantes, mientras la federación italiana extendió la prohibición de toda actividad deportiva hasta el 13 de abril.
Italia ha estado en confinamiento durante tres semanas.
Los propietarios de Fiorentina y Torino creen que la liga no podrá terminar, pero Gravina ha dicho que sería una “injusticia” desechar la campaña.
“La máxima prioridad es completar la temporada”, dijo a TMW Radio. “La idea es comenzar desde el 20 de mayo o principios de junio, hasta finalizar en julio.
“Incluso se ha hablado de agosto y septiembre. Dejé en claro que odiaría correr el riesgo de comprometer otra temporada para salvar ésta.
“Creo que desechar la temporada sería bastante complejo. Sería una grave injusticia, lo que llevaría a una emergencia legal durante una epidemiológica.
“El Scudetto necesitaría ser asignado y la propia Juventus, creo, ha expresado su disgusto por tal solución”.
Bélgica se convirtió en la primera liga europea de primer nivel en cancelar el resto de su temporada y coronó al Club Brugge como campeón de la liga el jueves.
Más tarde, la UEFA, la Asociación de Clubes Europeos y las Ligas Europeas enviaron una carta conjunta a sus miembros diciendo que era de “importancia capital” que las competiciones, incluidas las ligas nacionales, se decidieran en el campo.
Mientras tanto, el presidente de Brescia, Massimo Cellino, dijo que no tiene sentido tratar de completar la temporada de la Serie A y que preferiría perder los partidos que poner a su equipo en el campo.
“Esta temporada ya no tiene sentido”, le dijo a Gazzetta dello Sport en una entrevista el jueves.
“Nos hemos detenido, ningún equipo volverá como antes, los partidos serán a puerta cerrada y además existe un riesgo para la salud de los atletas. Para mí, volver al negocio es pura locura.
“Si nos obligan a jugar, estaría dispuesto a no dejar al equipo y perder los partidos 3-0 por respeto a los ciudadanos de Brescia y sus seres queridos que ya no están allí”.