La ausencia de la experiencia de la amistad es costumbre observarla en el período preelectoral. Se justifica con argumentos falsos al cambiar de un partido a otro. Es una acción de la amistad por utilidad. Esto es negación de carácter. Nada de nobleza personal. No es la política para servir al país. Lo catalogo como el sistema político de intereses económicos personales. Ya lo dicen “buscar lo suyo” como si el dinero del erario fuera del incumbente del cargo. La política como ciencia está fundamentada en la moral, si sigue la ética. Es mentira llamar líder, sí corrupto, corruptor. Sí sabemos y se conocen los verdaderos hombres en política honestos, que los hay.
El sistema político de intereses económicos es innegable. Todos nos conocemos y nada queda oculto bajo el sol. ¿Por qué se archivan las auditorías de la Cámara de Cuentas con “irregularidades” y funcionarios violan la ley y no hacen la declaración jurada de bienes y nada sucede?
Me detuve y las ya más que oxidantes neuronas, me recuerdan lo siguiente. En la Roma antigua, Marco Tulio Cicerón gran tribuno y calificado con el Gran Cónsul, le escribió una carta a su gran amigo publicista de sus libros Pomponio Atico, en la cual expresa como lo repudiaban y criticaban los corruptos políticos y ricos comerciantes. Pomponio le contestaba.
“Querido Marco. Hay dos clases de político: El que ama la tolerancia por sí mismo y cree que todos los hombres la aman por naturaleza. Y el que se casa con la tolerancia para ocultar las actividades de los seres viciosos que lo apoyan”.
Esto no ha cambiado. ¿Cómo esto se eliminaría en este país? Sencillamente, dándole vida al olvidado Padre de la Patria Juan Pablo Duarte y la historia. Ejercer el cumplimiento de Decálogo, sólo con esta verdad pura, nacionalista de servidores honestos. Me veo obligado por si se quiere ignorar como pensaba y actuaba nuestro noble Patricio.
Leamos el Decálogo Duartiano
1.- Ama a tu patria con amor invariable y entrega total.
2.- Ten fe en tu pueblo y en su destino.
3.-Jamás permitas que ninguna porción de su territorio sea cedida a alguna nación extranjera.
4.-Respeta la ley y mírala como la reguladora de las relaciones sociales.
5.-Considera la política como una de las más nobles actividades humana. Ejércela con desinterés económico, justicia y patriotismo.
6.-Considera a la libertad como lo más preciado de la vida.
7.-Lucha por la unión de todos los dominicanos, sin tomar en cuenta la clase a que pertenezcan.
8.-Considera a la justicia como el principal deber del hombre y el fundamento de la felicidad social.
9.-Lucha por una sociedad libre de privilegios políticos o económicos que se opongan a la unión armoniosa de todas las clases sociales.
10.-Considera a Dios, a la libertad y a la patria como los supremos intereses del pueblo dominicano.
Consérvense bueno. Una alegría, amor, aceptación, bendición y agradecimiento totales. Estas son las cinco actitudes de Dios. El autor es vicealmirante retirado de la Armada Dominicana.