Los chicos de Utah lograron una importante victoria a pesar de la ausencia de su máximo anotador, Donovan Mitchell, debido a un esguince en el tobillo derecho.
«Todos me apoyan mucho», dijo Clarkson refiriéndose a sus compañeros. «Ellos creen en mí y creen en lo que puedo hacer. Es hermoso».
Esta fue la octava victoria de los Jazz en nueve partidos luego de arrasar al equipo local, sobre todo en el último cuarto, que ganaron fácil por 41-24 gracias a ocho triples.
Clarkson venía de un juego miserable el martes por la noche, cuando se fue de 11-0 desde el rango de 3 puntos y 1 de 13 en general para terminar con solo dos puntos en una victoria sobre Sacramento.
Fue su segundo juego consecutivo sin un triple después de hacer al menos uno desde larga distancia en 99 juegos consecutivos.
Clarkson falló cinco triples más en los primeros dos cuartos del partido de hoy, extendiendo su sequía más allá del arco a 23 tiros consecutivos.
«Este grupo está muy cerca, no tienen distracciones y juegan duro», dijo el entrenador de los Sixers, Doc Rivers.
Los Sixers, que jugaron por segunda noche consecutiva, solo utilizaron ocho jugadores. Furkan Korkmaz se quedó fuera, mientras que el exalapivot de los Pistons Tobias Harris permaneció fuera de juego debido a los protocolos covid-19.
Jeremi Grant anotó 27 puntos para los Pistons, pero solo cinco en la segunda mitad.
Cade Cunningham anotó 18 puntos y 11 rebotes por los Pistons, pero falló 13 de sus 17 intentos desde el campo. Cunningham, la primera selección general de este verano, tiene un 17.9% (7 de 39) de acierto en sus primeros tres juegos, incluido 1 de 21 en triples.
Los Pistons dispararon solo para un 27,3% (6 de 22) desde la pintura.
Los Sixers lideraban 97-82 con 8:13 por jugar, pero Cunningham acertó cuatro tiros libres y los Pistons redujeron el déficit a 97-89, pero los chicos de Filadelfia convirtieron dos pérdidas de balón en canastas fáciles para aumentar la ventaja a 103-89 con 5:46 por jugarse.
