Nueva York – Dirigentes del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC) en los Estados Unidos renunciaron a esta organización para sumarse al nuevo Partido Renovador Reformista (PRR) liderado por los ingenieros Héctor Rodríguez Pimentel, Osiris de León y Ricardo Espaillat.
Entre los renunciantes, quienes ocuparon posiciones de alto perfil por años en la filial del PRSC figuran Miguel Durán, Franklyn Sánchez, doctor Marino Guzmán, José Ignacio Batista, Catalino Domínguez, María Melo, Clara Silverio, Luis José Rosó, Efraín Gabriel, Gladis Martínez Polanco, José Luis Franco y otros más cuyos nombres serán divulgados más adelante.
También renunciaron los activistas y dirigentes medios, José Pérez, Rafaelina Castro, Ángela Parache, Johnny Vargas y Denise Cruz.
Dijeron en una declaración escrita que se van del PRSC para poner fin a décadas de inercia e irrespeto a los principios legados por el líder histórico, el fallecido doctor Joaquín Balaguer y que el PRR garantiza el rescate de los valores familiares, la seguridad pública en la República Dominicana y llenará las expectativas del pueblo.
Advierten que en la dirección del PRSC en Nueva York, habrá un desmoronamiento total y que su renuncia es también en rechazo del continuismo de su estructura dirigencial a nivel nacional que viciosamente y sin respeto individual ni colectivo se impuso en la asamblea celebrada el domingo 27 de noviembre en la ciudad de Santo Domingo con modalidad de votación amañada y cargada de perversidad política, por lo que hacen publica las renuncias dirigidas en especial a la cúpula del PRSC.
Sostienen que la dirección nacional del PRSC se mantuvo renuente durante ocho meses en celebrar la asamblea para elegir una nueva dirección que caducó su período legal el 30 del mes de marzo 2022 como fragante violación a los códigos estatutarios del partido.
“Ese tiempo fue más que suficiente para planificar irregularidades a fin de quedarse en la dirección del PRSC y continuar sin ética sus negocios politiqueros y, sobre todo, imponiendo una férrea dictadura a sus militantes”, indican los renunciantes.