La Republica Dominicana ha convulsionado en los últimos días tras la revelación de la Operación Calamar, que involucra el excandidato y exministro de Obras Públicas, Gonzalo Castillo; al exministro administrativo de la Presidencia, José Ramón Petalta, y al exministro de Haciendas, Donald Guerrero, los tres funcionarios de primera línea de los gobiernos de Danilo Medina (2012-2020).
Pero esto no se queda ahí, ya se habla de que en los próximos días se podría conocer en los tribunales un expediente sobre las famosas visitas sorpresas que encabezó el expresidente Medina y algunas auditorías que fueron archivadas, engavetadas y hasta desaparecidas de hace varios gobiernos atrás.
«Hay mucha gente que hizo mucho daño en este país, que manejó instituciones y desaparecieron auditorías que revelaban mal manejo de los recursos públicos; ministros que llegaron hasta a amenazar a quienes dirigían la Cámara de Cuenta para que sus auditorias no salieran a la luz; pero, ahora se están investigando, el Ministerio Público ha puesto un alto interés en los casos y serán desveladas en cualquier momento», dijo una fuente a DominicanosHoy.
RD bota pus por donde lo exprimen. La corrupción ha sido un problema crónico en la República Dominicana durante décadas, afectando todos los niveles de la sociedad, incluyendo el gobierno, las empresas y la sociedad civil. Se han realizado varios esfuerzos para combatir la corrupción en el país, pero aún queda mucho por hacer.
En los últimos años, ha habido una mayor atención y presión pública para combatir la corrupción (Marcha Verde), especialmente después del escándalo de Odebrecht, en el que se reveló que la compañía brasileña había sobornado a funcionarios dominicanos para obtener contratos de construcción. Esto llevó a la condena de varios funcionarios y empresarios, incluyendo al exministro de Obras Públicas, Víctor Díaz Rua, políticos y un empresario.
Además, se han establecido instituciones y leyes para combatir la corrupción, como la creación de la Dirección General de Ética e Integridad Gubernamental, que dirige la doctora Milagros Ortiz Bosch, y la promulgación de la Ley de Compras y Contrataciones Públicas, que busca garantizar la transparencia y la competencia en los procesos de adquisición de bienes y servicios.
La corrupción ha sido un problema crónico en la República Dominicana durante muchos años. A menudo se asocia con el sector público, incluidos los altos niveles de funcionarios gubernamentales, pero también se extiende a la sociedad en general, incluidas las empresas privadas.
Los informes indican que la corrupción ha afectado significativamente la economía dominicana, incluido el desvío de fondos públicos y la falta de transparencia en los procesos de contratación y adquisiciones. Además, ha socavado la confianza de los ciudadanos en las instituciones gubernamentales y ha fomentado la impunidad.
En respuesta, el gobierno dominicano ha tomado medidas para combatir la corrupción, incluida la creación de una Comisión Nacional de Ética y Combate a la Corrupción, y ha implementado reformas legales y administrativas para mejorar la transparencia y la rendición de cuentas. También ha impulsado la conformación de un Ministerio Público independiente.
Sin embargo, la corrupción sigue siendo un problema importante en la República Dominicana y hay críticas de que se necesita un mayor compromiso y acciones efectivas para abordar el problema de manera sostenible.
La corrupción es un problema significativo en la República Dominicana y ha sido un tema de preocupación para los ciudadanos y organizaciones internacionales. Según el índice de percepción de la corrupción de Transparencia Internacional, la República Dominicana se ubicó en el puesto 137 de 180 países en 2021.
La corrupción se ha infiltrado en muchos sectores de la sociedad dominicana, incluyendo la política, los negocios y el gobierno en general. Hay informes frecuentes de sobornos, malversación de fondos públicos, tráfico de influencias y nepotismo en los niveles más altos de la administración pública. Además, la falta de transparencia en la toma de decisiones y la falta de responsabilidad en el uso de los recursos públicos contribuyen a la perpetuación de la corrupción en el país.
La sociedad civil y las organizaciones internacionales han trabajado para abordar el problema de la corrupción en la República Dominicana. Por ejemplo, se han creado agencias anticorrupción para investigar y perseguir casos de corrupción, y se han establecido leyes y regulaciones para promover la transparencia y la rendición de cuentas. Sin embargo, el problema persiste y sigue siendo un desafío importante para el país.
Auditorías
La Cámara de Cuentas realizó auditorías en el pasado que fueron engavetadas y otras desaparecidas por funcionarios, porque revelaban corrupción en las instituciones que dirigían.
En Ministerio Público ha puesto total atención en estos casos y estudia estás auditorías, que podrían llevar al banquillo de los acusados a más de un exministro de Estado.
Alexis Medina
El expresidente Danilo Medina tiene varios hermanos, algunos de los cuales han estado involucrados en la política y los negocios en la República Dominicana.
Uno de sus hermanos más conocidos es Juan Alexis Medina Sánchez, quien fue arrestado en 2020 junto con otras personas por presunta corrupción en el gobierno de su hermano. Alexis Medina fue acusado de utilizar su influencia para beneficiarse de contratos gubernamentales y obtener ganancias ilegales. Actualmente se encuentra bajo prisión preventiva mientras se lleva a cabo su juicio.