Miami. -Debido a los efectos del calentamiento global y de fenómenos destructivos de plantaciones agrícolas como poderosos huracanes, hay una crisis en la producción de cítricos en diferentes latitudes del mundo y la República Dominicana no escapa a esa realidad.
La advertencia está contenida en un artículo dado a conocer en esta semana por la periodista Josefina Stubbs, exasistente del Secretario General de las Naciones Unidas y vicepresidenta del FIDA (Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola).
El artículo señala que la República Dominicana, importador y procesador de naranjas y de jugo de naranja y actor importante en las cadenas y mercados mundiales del cítrico, tendrá que pagar más para conseguir las cantidades y calidades de naranjas que demanda el mercado.
Ante los indicadores científicos de que el 2023 ha sido el año más caluroso jamás registrado, se prevé que la crisis climática se profundizara y la agricultura, la producción de alimentos y el cultivo de cítricos incluida la naranja seguirá en todo el planeta, sufriendo duras embestidas y sus precios serán impactados.
En medio de las altas temperaturas en todo el planeta, la periodista señala que “las naranjas también sobreviven de la ley de oferta y demanda”, en vista de resultado de la baja disponibilidad, las estimaciones de la industria cítrica y los productores indican que para el año 2022-2023 la producción de jugo de naranjas caería un 9 por ciento.
Como un efecto colateral, Stubbs señala en su artículo que, a su vez, “los procesadores, que ya tienen que pagar un costo adicional debido a la disminución de la oferta de naranjas, también deben comprar más naranjas para hacer la misma cantidad de jugo”.