Desde el Palacio Nacional el departamento de prensa y comunicaciones distribuyó una nota que no quisiera que pasara desapercibida por los lectores de esta columna. El periódico Al Momento.Net la publicó y quisiera compartirla con los lectores.
“El presidente Luis Abinader encabezó el año pasado 716 actividades y 1,106 reuniones ordinarias dentro del Palacio Nacional, lo que simboliza más de tres años de trabajo condensados en un solo año calendario.
Asimismo, un reporte de la Presidencia indica que en 2023 el Mandatario recorrió 41,173 kilómetros dentro de la República Dominicana, el equivalente a darle la vuelta al mundo.
«Desde inauguraciones y actos públicos hasta audiencias y ceremoniales, el presidente Abinader ha mantenido una agenda abrumadora, asegurando que cada rincón de la República Dominicana reciba la atención que merece», señala.
Detalla que el Distrito Nacional lideró en actividades con 223, seguido por Santiago con 72 y Santo Domingo Norte, Este y Oeste 45, Montecristi 29 actividades, Puerto Plata 25, La Altagracia 22, San Pedro de Macorís 20, Azua y Barahona 17 cada una, y San Cristóbal, Santiago Rodríguez y Monseñor Nouel 16.
La información suministrada por la Dirección de Ceremonial y Protocolo del Poder Ejecutivo indica que en agosto Abinader encabezó 168 actividades y reuniones ordinarias, en octubre 166, junio 159, julio 125 y noviembre 128.
Los días con mayor número de actividades fueron martes 298, miércoles y jueves 277 cada uno, lunes 241, viernes 272, sábados 163 y domingos 124.
Como puede verse, estamos ante un presidente a tiempo completo, que no se ha tomado un solo día de descanso, que le ha dedicado los últimos tres años de su vida a trabajar por el bienestar del pueblo dominicano en medio de las peores circunstancias, tanto nacionales como internacionales.
Si los datos son exactos -no tengo razones para dudarlo- el país ha visto como este hombre se ha dedicado en cuerpo y alma, sacrificando el tiempo de su familia, amigos y relacionados, para que las adversidades no sean un obstáculo para el crecimiento y el desarrollo de la nación. Repito, en las peores condiciones, tanto internas como externas.
A su llegada al poder el gobierno del presidente tuvo que enfrentar la pandemia del coronavirus que puso en jaque a todo el mundo. Fuimos de los primeros países en salir airosos de la pandemia, en recuperar el turismo, las zonas francas, el empleo, la estabilidad económica y financiera. Fue preciso hacer grandes esfuerzos y sacrificios. No hubo descanso. El presidente no se tomó un día de descanso.