CARACAS (AP) — El Consejo Nacional Electoral de Venezuela anunció que el presidente Nicolás Maduro es el ganador de las elecciones del domingo, inmediatamente la oposición denunció irregularidades en el proceso de conteo. El mandatario se jugaba su reelección y la continuidad de un proyecto político autoproclamado como socialista que inició el fallecido Hugo Chávez hace 25 años.
El CNE indicó que Maduro obtuvo un 51,20% de los votos con el 80% de las mesas escrutadas, en el que fue el mayor desafío electoral desde su llegada al poder hace 11 años con Edmundo González como rival representando la candidatura unida de la oposición.
El aspirante opositor quedó con 44,2% del respaldo popular, según los datos difundidos por Elvis Amoroso, presidente del CNE.
Los votantes esperan para acceder a la Escuela Andrés Bello, el principal centro de votación en Caracas, Venezuela, durante las elecciones presidenciales del domingo 28 de julio de 2024. (AP Foto/Cristian Hernández)
No obstante, la líder opositora María Corina Machado desconoció el triunfo de Nicolás Maduro y dijo que Edmundo González es el nuevo presidente de Venezuela.
Machado indicó que con el 40% de las actas que están en su poder, González se impuso con 70% de los votos, 40 puntos porcentuales por encima de Maduro. “Esta es la verdad”, recalcó.
“Queremos decirle a todos venezolanos que Venezuela y todo el mundo lo sabe” que González salió victorioso, aseveró la opositora que abanderó la campaña de González, al quedarse fuera de la contienda por su inhabilitación política por 15 años. “Hemos ganado en todos los estados del país”.
Se sumó al rechazo el candidato opositor. “Nuestra lucha continúa y no descansaremos hasta que la voluntad del pueblo de Venezuela sea respetada”, manifestó Edmundo González.
Durante una concentración a las afueras del palacio de gobierno, Maduro celebró entre bailes y canciones su victoria. “No pudieron con las sanciones, no pudieron con las agresiones, no pudieron con las amenazas, no pudieron ahora y no podrán jamás con la dignidad del pueblo de Venezuela”, expresó el gobernante.
Los venezolanos aguardaron ansiosos por varias horas los resultados, cuando la exlegisladora Delcy Solórzano, representante nacional de la coalición opositora ante la autoridad electoral, denunció sin mostrar pruebas que el CNE había “paralizado la transmisión de actas” y que en una “importante cantidad de centro de votación” se estaba retirando a sus testigos para el conteo de votos.
Poco después, Omar Barboza, secretario ejecutivo de la principal coalición opositora, aseguró que la oposición había recopilado actas de votación oficiales del 30% de las mesas de votación. “No debería tener dudas si se quiere actuar con la verdad y reconociendo la voluntad popular”, dijo.
Simpatizantes del oficialismo se congregaron frente al palacio presidencial de Miraflores donde había un ambiente festivo antes incluso de conocerse los resultados.
También el jefe de campaña del presidente Nicolás Maduro y jefe de la Asamblea Nacional de mayoría abrumadora del oficialismo, se mostró confiado que los comicios presidenciales iban a ser favorables para el oficialismo horas antes de que la autoridad electoral anunciara datos del conteo.
Durante la jornada, después de la hora prevista del cierre de urnas y sin que hubiera un anuncio oficial de que había terminado la votación, hubo roces entre seguidores del oficialismo y de la oposición a las afueras de algunos centros de votación.
Sin embargo, el ministro de Defensa, el general en jefe Vladimir Padrino López, afirmó que se vivió una jornada electoral “en perfecto orden, en perfecta paz”. El ministro de Relaciones Interiores, el almirante en jefe Remigio Ceballos, desestimó los incidentes, resaltando que fueron “minúsculos” y no afectaron el desarrollo de la elección.
Entre las primeras reacciones a los datos del CNE que dieron por ganador a Maduro, el secretario estadounidense de Estado, Antony Blinken, puso en duda los resultados en Venezuela: “Tenemos serias preocupaciones de que los resultados anunciados no reflejan la voluntad o los votos del pueblo venezolano”.
Asimismo, el mandatario chileno, Gabriel Boric, cuestionó que “el régimen de Maduro debe entender que los resultados que publica son difíciles de creer” y exigió “total transparencia de las actas y el proceso”, permitiendo que veedores internacionales “no comprometidos con el gobierno” den veracidad a los resultados.