El ginecólogo oncólogo, Ariel Ramírez Oliver, destacò la importancia de los desequilibrios hormonales en la salud femenina y su impacto en el desarrollo de enfermedades graves.
Según Ramírez Oliver, el desequilibrio entre estrógenos y progesterona puede dar lugar a una serie de patologías significativas, incluidas condiciones que pueden derivar en cánceres.
Explicó que el estrógeno, una hormona clave en el desarrollo de las características femeninas, juega un papel fundamental en el equilibrio hormonal de la mujer.
El especialista se refirió al tema al ser entrevistado por los especialistas Pablo de la Mota, Rosmeri Jaquez, Lorenzo Brea, Elías Grullón y Rafael Pérez, en el programa “Hablando de Salud”, transmitido por la plataforma digital El Nuevo Diario TV.
Sin embargo, señaló que cuando los niveles de estrógeno aumentan sin control, pueden surgir enfermedades relacionadas.
“El estrógeno es esencial para la apariencia femenina durante el desarrollo, pero un desequilibrio en esta hormona a lo largo de la vida puede causar problemas significativos”, afirmó.
Indicó que entre las patologías asociadas con estos desequilibrios se encuentran el síndrome de ovario poliquístico, el síndrome anovulatorio, y otras condiciones hormonales que pueden llevar a complicaciones graves.
“Estos trastornos no solo afectan la calidad de vida de las mujeres, sino que también están relacionados con riesgos elevados de cáncer y otras enfermedades serias”, advirtió.
Enfatizó que los hábitos en la juventud, incluyendo la alimentación y el sedentarismo, juegan un papel crucial en el desarrollo y la gestión de estas patologías.
“Es vital prestar atención a los hábitos de vida desde una edad temprana para prevenir desequilibrios hormonales y sus consecuencias a largo plazo”, concluyó.
