Washington. El Fondo Monetario Internacional (FMI) advirtió de los riesgos de una relajación significativa de las condiciones financieras, en un panorama macroeconómico mundial caracterizado por una elevada incertidumbre desde la pandemia del covid-19.
Una relajación pronunciada de tales condiciones en un entorno de alta incertidumbre macroeconómica puede exacerbar los riesgos a la baja para el crecimiento, según un adelanto de su Informe de estabilidad financiera global (GFSR, por sus siglas en inglés).
El capítulo ‘Estabilidad macrofinanciera en medio de alta incertidumbre económica’ refleja que cuando las condiciones financieras se vuelven más fáciles las expectativas de crecimiento económico suelen aumentar, debido entre otros factores a tasas de interés más bajas.
No obstante, deja claro que esas condiciones laxas pueden incrementar las vulnerabilidades de la deuda, lo que empeora los riesgos para un incremento en el futuro.
El FMI constata que la incertidumbre sobre los resultados y las políticas económicas se disparó durante la pandemia y se ha mantenido alta desde entonces. Una mayor inseguridad macroeconómica, dice, puede afectar “profundamente” la estabilidad macrofinanciera.
Según sus cálculos, un aumento de la incertidumbre macroeconómica equivalente al experimentado durante la crisis financiera mundial reduce el resultado a la baja del crecimiento del PIB real a un año, vista en 1,2 puntos porcentuales de promedio en las economías de mercados avanzados y emergentes.
El FMI alerta de que la incertidumbre puede acelerar los riesgos de caída del mercado en caso de un ‘shock’ adverso, retrasar las decisiones de consumo e inversión del sector privado y reducir la oferta de crédito interno por parte de las instituciones financieras.