Como un gran hito para la salud pública del país, fue descrita la ceremonia de graduación de la segunda promoción del Programa de Especialización del Personal de Enfermería en Salud Materno Neonatal de Bajo Riesgo y Planificación Familiar, que entregó al país 31 nuevos profesionales.
Esas graduadas de la citada promoción, se suman a las 22 de la primera cohorte investidas en el 2022, para un total de 53 egresadas en esta especialidad.
Este personal de enfermería, calificado para manejar embarazos y partos de bajo riesgo en centros de salud materno infantiles, representa un importante avance en los esfuerzos por reducir a cero la cifra de muertes maternas y neonatales prevenibles, y mitigar necesidades insatisfechas de planificación familiar en la República Dominicana.
El evento contó con la participación de representantes de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), del Ministerio de Salud Pública, el Servicio Nacional de Salud, el Fondo de Población de las Naciones Unidas, la Sociedad Dominicana de Obstetricia y Ginecología y la Fundación Popular.
Es de conocimiento público que la mortalidad materna sigue siendo un desafío crítico en América Latina y el Caribe, incluida la República Dominicana, que presenta una tasa de mortalidad materna que supera el promedio regional.
Ante esta realidad, el Gobierno dominicano, a través del Ministerio de Salud Pública y el Servicio Nacional de Salud, ha priorizado la reducción de la morbi-mortalidad materna y neonatal, reafirmando su compromiso en reiteradas ocasiones y asumiendo la recomendación de fortalecer capacidades mediante la implementación de este programa de especialización.
Dicho programa es impulsado por el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), a través del Departamento de Promoción de la Salud de la Mujer y el Recién Nacido de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile, junto a la Escuela de Enfermería de la Facultad de Ciencias de la Salud-UASD, con el apoyo del Ministerio de Educación Superior, Ciencia y Tecnología (MESCyT), la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS), el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) y la Fundación Popular.
La ceremonia de graduación no solo celebra el logro de estas profesionales, sino que también marca un paso importante hacia la mejora de la atención a las mujeres y sus recién nacidos en el país.
Las palabras de bienvenida fueron ofrecidas por el vicerrector de Investigación y Postgrado de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, el maestro Radhamés Silverio, quién resaltó la importancia de la continuidad de esta especialización de la Escuela de Enfermería, para “la formación de profesionales capaces de enfrentar los desafíos que afectan la salud de nuestras comunidades.
“Este esfuerzo que se realiza de manera conjunta refleja el impacto de una visión orientada a disminuir la mortalidad materna neonatal, garantizando así un futuro más saludable para todas nuestras familias.”, agrega.
De su lado, la maestra Alquidia Durán, directora de la Escuela de Enfermería de la UASD, destacó la importancia de continuar con el programa de especialización y reafirmó el compromiso que a partir de ahora tienen estas nuevas profesionales para enfrentar los desafíos en el ámbito de la salud materna.
“Hoy no solo celebramos el cierre de un ciclo, sino el comienzo de una misión. Ustedes son ahora agentes de cambio, profesionales con el conocimiento y competencia necesaria para impactar de manera positiva en uno de los momentos más críticos de la vida, el nacimiento. En sus manos estará no solo la vida de una madre o un bebé, sino la esperanza de familias enteras que confían en su humanidad, ética y profesionalismo. Este logro es un testimonio del poder de la perseverancia y del compromiso con la excelencia”.
Por su parte, el representante nacional de UNFPA, Mario Serrano Marte, resaltó que si cada mujer embarazada contara con el acompañamiento cercano y profesional de una partera profesional, como las enfermeras obstétricas que hoy se gradúan y se integrarán al sistema de salud, estaríamos más cerca de garantizar partos seguros y saludables.
“Invertir en la formación de parteras es una de las intervenciones más costo-efectivas en salud pública. Cada peso invertido en la capacitación de obstétricas puede generar múltiples retornos en términos de vidas salvadas y reducción de costos sanitarios.”, afirmó.
Dabeida Agramonte, representante de la Fundación Popular, señaló la importancia de la sostenibilidad de este programa y del esfuerzo conjunto que se está haciendo para que sigan formándose profesionales: “Que estas profesionales estén ya incorporadas, la primera cohorte y la segunda cohorte habla de sostenibilidad y que de aquí tenemos que salir a armar la tercera cohorte.”
Geraldina Valerio, representante de las enfermeras graduadas, en un emotivo discurso agradeció el esfuerzo de sus compañeras, de sus familias y de todas las entidades y personas que las han apoyado durante este proceso.
“Hoy para mí es un verdadero honor ser la representante para dar estas palabras de agradecimiento a todas las personas que aportaron un granito de arena para que este sueño de 31 mujeres se haga realidad. Esta es una tarde importante, que marca el inicio de una nueva era para nosotras. Es una meta que hemos conseguido con grandes expectativas y que ha dejado en nosotras tantos recuerdos, recuerdos que nos acompañarán por el resto de nuestras vidas.”
En tanto que, el doctor Martin Ortiz, director Materno Infantil y Adolescentes del Servicio Nacional de Salud (SNS) hizo un recorrido desde que este proyecto inició hasta la graduación de la segunda cohorte.
“Hace un par de años se nos acercaron de UNFPA con la finalidad de que iniciáramos este proyecto y ver cómo el Servicio Nacional de Salud podía apoyar en este proyecto maravilloso que son las enfermeras obstétricas. Nos acercamos a nuestro director ejecutivo, el doctor Lama, que inmediatamente dijo, vamos a hacer lo que hay que hacer, y hoy tenemos 22 primeras enfermeras de la primera cohorte que ya están incorporadas a nuestros hospitales de segundo nivel porque ahí creemos que van a ser mucho más efectivas en ese trato respetuoso y humanizado de atención prenatal, de la atención del embarazo bajo riesgo y de nuestros niños. Y hoy está la universidad y todos los aliados en este proceso, entregándonos 31 nuevas enfermeras obstétricas.
En ese mismo orden, el doctor Tamy Santana, encargado Materno Infantil del Ministerio de Salud Pública, refirió a las graduadas la importancia que a partir de ahora tienen en el desempeño de su profesión.
“En una sociedad donde tenemos muchos tabúes contra lo que es la sexualidad y las prácticas, también es importante el oído y el conocimiento que ustedes puedan suplir a nuestras mujeres y a nuestras familias. Porque van a dar una información veraz, oportuna, van a entrar en ese diálogo reflexivo con las mujeres, no solamente es la administración y las competencias que adquirieron en una consejería de planificación familiar y en administración de un método anticonceptivo, de un implante, de un DIU, sino también en salvaguardar los derechos reproductivos de la mujer dominicana.
Este programa de formación e inserción, que comenzó a gestarse en 2018, ha sido fundamental para fortalecer la capacidad del sistema de salud en la República Dominicana,