La Oficina Nacional de Meteorología (Onamet) informa de aguaceros y tronadas en estos días del quinto mes del año, que casi concluye. El organismo habla de vaguadas, y significativos valores numéricos de precipitaciones que han obligado a mantener en alerta a muchas provincias, por desbordamientos de ríos, arroyos y cañadas, inundaciones repentinas y deslizamientos de tierra.
Encima, la temporada ciclónica está ya a las puertas, a partir de este primero de junio y hasta el 30 de noviembre. El problema es que se espera sea más activa de lo normal, con el desarrollo de 13 a 14 tormentas, de las que seis podrían intensificarse hasta alcanzar categorías de huracanes y dos llegarían a ser considerados huracanes intensos, tal y como predijo y dio a conocer la Onamet.
De todos modos, “bien vengan penas si vienen solas”, dicta el viejo refrán y simultáneamente a las condiciones del tiempo, el país vive convulsionado por los resultados de unas elecciones que parecen nunca acabar. El Partido Revolucionario Moderno (PRM) y otras organizaciones de oposición insistieron en poseer “evidencias” del fraude electoral cometido en las votaciones del 15 de mayo pasado.
Se habla de “suplantación de actas, desaparición de boletas correspondientes a la oposición, doble votación, boletines que suman más de 100 por ciento y desaparición de colegios electorales”, entre otras graves acusaciones.
Así termina mayo en República Dominicana…Pero no todo es malo: “Los líderes del G7 se comprometieron a lograr una pronta puesta en marcha del Acuerdo de París sobre cambio climático y a dar los pasos necesarios para lograr su ratificación en todos los países firmantes en 2016”.
Esto quiere decir que en lo que las lluvias cesen donde ya han dejado demasiado mojado el terreno, y caigan en sitios que aún lo requieren; en tanto se llegue a una conciliación política y se dé la razón a quien la tenga, lo que significa que se le otorguen cargos congresionales a quienes de verdad los obtuvieron …Mientras, podemos pensar que los poderosos países que pueden todavía salvar la casa de todos, el mundo en que existimos, han firmado una declaración conjunta en la cual ratificaron su intención de continuar esforzándose para «proporcionar y movilizar una mayor financiación para el clima a través de fuentes públicas y privadas».
Es que, en definitiva, si lo anterior no se logra, de nada vale que sigan peleando los partidos, porque sin tierra, no puede haber absolutamente nada.
