Una demanda de su exmánager Sam Lufti ha sacado a la luz que la cantante Britney Spears tuvo un grave problema de consumo de drogas que en una ocasión la llevó a pasar la noche en un estacionamiento.
“El 1 de octubre de 2007 (a Britney Spears) le quitaron la custodia legal de sus hijos Jaden y Sean. Pasó la noche en un estacionamiento, después llamó a Sam [Luft] y le dio que él era una de las pocas personas en quien confiaba”, asegura la querella que se tramita en la Corte de Apelaciones de California.
Luego de aquel incidente, la intérprete de “Toxic” mantuvo una relación sentimental y profesional con su exmánager que concluyó en 2008, cuando Spears se atrincheró en su casa para evitar entregarle sus hijos al padre, Kevin Federline.
Según asegura Lufti en su demanda, en esa época llegó a un acuerdo económico con la artista que se ha incumplido.
Spears comparte en la actualidad la custodia de sus hijos y protagoniza un exitoso show en Las Vegas.
