Violencia vicaria en RD

LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||

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Las noticias parecen trasgredir el más elemental sentimiento humano. En este caso se trata de un hombre que mató a sus dos hijos de tres y cinco años de edad y luego se ahorcó. Se habla de que “habría cometido el hecho porque supuestamente su esposa lo dejó” y resulta que no son pocos  los casos  en que los pequeños seres, frutos de una unión conyugal, pasan a ser víctimas de la violencia intrafamiliar y de género, y como en este terrible caso, con una existencia segada por quienes debieron velar por su vida y desarrollo.
 
Precisamente, este fue tema al cual se le dedicó un interesante coloquio el pasado mes de marzo, por parte del periódico El Día, como actividad principal dedicada a sus 14 años de existencia, y si algo marcó gran expectativa y reflexión, fue lo abordado por la psicóloga clínica y forense española Sonia Vaccaro, quien habló de la violencia vicaria, que “es aquella que se ejerce contra los hijos con el propósito de herir a la mujer”; se trata de una violencia secundaria, que se hace a través de terceros, como apuntó la especialista.
 
Lamentablemente, “Los hijos danzan en el ciclo de la violencia”, tal y como tituló su intervención la psicóloga y terapeuta familiar Soraya Lara de Mármol, presidenta y cofundadora del Patronato de Ayuda a Casos de Mujeres Maltratadas (Pacam).
 
Y esta afirmación de que los hombres violentos están utilizando sus hijos para continuar maltratando y violentando a las mujeres, se cumple en hechos como los que preceden estas líneas, porque, en ensañamiento no ocurre solo con ellas, sino con todo aquello que aman, están apegadas y le tienen cariño.
 
En verdad, si “las mujeres no pueden tener el control sobre la violencia que ejerce su pareja, mucho menos podrán los hijos”, Y se impone entonces fortalecer las políticas públicas, sobre todo las dirigidas a la protección a los menores y prestar mucha atención a esas más de 75.000 denuncias de violencia intrafamiliar que se generan cada año.
 
Aunque no es exclusivo del territorio nacional, los asesinatos de menores con edades comprendidas entre cuatro meses y 16 años, cuyas causas fueron la violencia contra su madre se han multiplicado y algo hay que hacer con mayor fuerza y urgencia, porque esa furia criminal contra la mujer-madre es una forma de maltrato infantil, que acaba, como en estos casos de manera cruel e inhumana.