Este domingo se vivirá una de las mayores fiestas en los Estados Unidos con el Super Bowl 50 entre los Denver Broncos y Carolina Panthers.
El Super Bowl es el segundo día en el que más comida se consume en Estados Unidos, detrás únicamente del Día de Acción de Gracias, de acuerdo a la National Chicken Council, y esto significa que los aficionados gastarán una gran cantidad de dinero para ver el partido.
De acuerdo a una encuesta realizada por la National Retail Federation, se espera que 189 millones de personas vean el Super Bowl con un consumo promedio de 82.19 dólares, lo que generará un gasto estimado de 15,500 millones de dólares, una cantidad récord.
Las alitas de pollo se colocan como el alimento más consumido durante el Super Bowl con 1,300 millones de piezas (123 millones de libras), señala la National Chicken Council.
También se espera que los aficionados consuman papas fritas, aderezos y comida rápida.
La empresa Pizza Hut informó que el Super Bowl representa el día con más ventas del año. En el 2015, la empresa rompió su récord de ventas a través de internet, mientras que Domino’s Pizza refirió que sus ventas aumentan alrededor del 80 por ciento durante el Super Bowl.
Después de la pizza, las papas fritas y aderezos son los alimentos preferidos.
En cuanto a bebidas, la cerveza aparece como la gran favorita. Se estima que se consuman alrededor de 325 millones de galones, eso es alrededor de un galón por cada habitante de los Estados Unidos, es decir, 1.3 galones por cada habitante adulto (14 botellas de 355 ml).
De acuerdo a la empresa Nielsen, en las dos semanas previas al Super Bowl se vendieron alrededor de 50 millones de cajas de cerveza, cifra sólo superada por las ventas del día del trabajo y el 4 de julio. Después de la cerveza, los refrescos son la bebida más consumida.
Alrededor del 7.7 por ciento de los aficionados podrían adquirir nuevos televisores, con un rango de precio de entre 320 y 7,200 dólares.
También, se espera que cerca del 11 por ciento de los aficionados compren mercancía oficial de la NFL, como gorras, chamarras, playeras y jerseys de juego.
De acuerdo al portal Fanatics.com, los jerseys del mariscal de campo de los Broncos, Peyton Manning, han elevado sus ventas el 500 por ciento.
El año pasado, en el Super Bowl XLIX, la National Retail Federation calcula que se movieron alrededor de 14.3 mil millones.
El Super Bowl 50 impondrá récord en consumo de los aficionados
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