México.- Aldo Gutiérrez, uno de los normalistas baleados hace un año por la policía de Iguala, México, sigue hoy en estado de coma producto de una bala que le atravesó el cerebro.
El exestudiante de la escuela rural normal de Ayotzinapa ya no aparenta ser un joven de 20 años, como si el deterioro de su cuerpo se adelantara a su verdadera edad.
Pudo haber sido un testigo en las investigaciones sobre el crimen de Iguala, donde en aquella jornada la policía municipal atacó con saña los ómnibus en los que se trasladaban los normalistas con saldo de tres personas muertas y una veintena de heridos.
La barbarie fue tal que los policías incluso atacaron el autobús donde se trasladaba el equipo de menores Los Avispones de Chilpancingo. Uno de los jugadores está entre los fallecidos.
Tampoco pudo marchar hoy por esta capital junto a los padres de los 43 compañeros desaparecidos ni gritar consignas en reclamo de su aparición con vida.
Porque Aldo no puede hablar, está en estado vegetativo. Su único reflejo es un bostezo que repite continuamente. Ha bajado 20 kilos y a su cuerpo están conectados varios tubos, refiere el diario El Universal.
Su familia resiste y espera un milagro, aunque el director del hospital ya les dijo que se hizo todo lo posible y lo mejor es que lo lleven a su casa.
Sigue en coma normalista sobreviviente a crimen de Iguala
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