El 14 de mayo del 2015 el periódico El Día publica en primera plana que la Fiscalía General de Colombia confirmó que la organización de narcotraficantes conocida como El Clan Usuga utilizaba los servicios de un pastor evangélico dominicano para lavar dinero proveniente del tráfico de drogas.
Las autoridades colombianas apresaron a una cuñada del cabecilla de esta organización Dairo Antonio Usuga David alias Otoniel; Martha Cecilia Madrid alias la jefa; el dominicano Jorge Mercedes Cedeño, pastor de la iglesia que funciona en San Pedro de Macorís, La Romana y Monte Plata.
Esta operación exitosa las agencias anti narcótico de Colombia pone al descubierto una red de pastores evangélicos colombianos y dominicanos.
El periodista José Silvestre, director de la Revista La Voz de La Verdad del mes de junio del 2011 denunció que pastores e iglesias evangélicas servían al narcotráfico en la región Este.
A continuación el relato de Silvestre: Donde está ese dinero; quienes lavan ese dinero. Se dice que un reconocido empresario de bienes raíces en la Padre Abreu, otro que tiene un edificio y un negocio próspero en la Santa Rosa, otro que tiene restaurantes de hembras y varones, negocios de cambio de dinero, dos que tienen redes de bancas, uno que tiene un gran supermercado, tres financieras en la Padre Abreu, incluyendo uno con compraventa. Una gran familia que se ha hecho millonaria de la noche a la mañana, un diputado, cincos abogados relacionados al gobierno, dos dedicados a la venta de gasolina y gas y cuatro a los negocios de car wash y centros de diversiones y los nuevos lavadores que están invirtiendo en compra de emisoras y plantas televisivas amparados detrás de ciertos pastores corruptos de ciertas iglesias, donde se anidan más de 5 narcotraficantes y lavadores que se ocultan detrás de la religión y algunos lideres ambientalistas que incluso ya se han hecho de grandes mansiones en sectores privilegiados. En la próxima continuaremos dando más detalles de los narcos que se están protegiendo detrás de algunas iglesias evangélicas.
El periodista Silvestre hizo la siguiente precisión: Este ha sido un trabajo de investigación sobre las drogas, los asesinatos, el lavado y la corrupción, principalmente en la región Este del país, y los protagonistas afincados en la capital dominicana principalmente, entre ellos funcionarios civiles y militares. En nuestra investigación recopilamos datos que nos aportaron los mismos narcos rivales y otros de fuente de entero crédito, la mayoría prefirieron el anonimato para dar la información al periodista.
La investigación y sometimiento a la justicia de Colombia a los integrantes de esta red que utiliza a las iglesias evangélicas para lavar dinero confirma todo lo que narró Silvestre en la Revista la Voz de la Verdad provocando su asesinato.
El equipo de sicarios que asesinaron a Silvestre por orden Matías Avelino Castro o Joaquín Espinal Almeyda, algunos fueron sometidos a la justicia y otros andan por ahí como si nada hubiese pasado.
Una fuente presente en una reunión hizo la siguiente advertencia hay que tener cuidado con eso de Silvestre porque él vino deportado de los Estados Unidos; se involucró en ese negocio y más que periodista era un narco periodista.
Los presentes se miraron uno a los otros.
Ciertamente pueda que sea así. Ahora bien, por la importancia que tiene para el ejercicio del periodismo este asesinato tiene que investigarse y apresar a su autor intelectual: Avelino Matías Castro o Joaquín Espinal Almeyda.
En junio del 2011 en un artículo publicado en el Nuevo Diario afirme lo siguiente: Los periodistas no pueden rendirse ni auto censurarse frente a nadie mucho menos caer en la trampa que le tiende el criminen organizado y el narcotráfico de silenciarlos sea con la plata o el plomo.
Sigo creyendo eso y entiendo que la iglesia evangélica dominicana debe pronunciarse sobre la nueva modalidad de lavar dinero del narcotráfico utilizando a pastores que sirven al demonio no a Dios.
La Revista La Voz de la Verdad con pelos y señales desnuda el narcotráfico en la Región Este y por la valentía de Silvestre lo asesinaron.
Que su voz no se apague, es mejor homenaje que se le puede dar en La Romana y el país a Silvestre.
Que la iglesia diga quienes son los narcos pastores evangélicos.
Por cierto en la adicción de la Revista La Voz de la Verdad que dirigía Silvestre figura el nombre del senador y ex funcionario Félix Bautista, en un trabajo sobre las operaciones de los narcotraficantes Figueroa Agosto y Toño Leña.
