Nueva York.– Antes de iniciar su primera campaña completa como presidente de los New York Knicks, Phil Jackson les advirtió a todo el mundo que no se sintieran decepcionados si las cosas no resultaban a su gusto.
Antes de que los Knicks extendieran su cadena de derrotas a 12 partidos tras ser aplastados por los Memphis Grizzlies en el Fex Ex Forum la noche del lunes, Jackson inició una limpieza con el plantel del conjunto neoyorquino en un canje de tres equipos que incluyó a los Cleveland Cavaliers y el Oklahoma City Thunder.
Jackson finalmente logró encontrar a un equipo, los Cavaliers, que fueran capaces de llegar a un acuerdo y quitarle de sus manos al polémico pero talentoso J.R. Smith y al lesionado Iman Shumpert por Alex Kirk, Lou Amundson y una selección de segunda ronda del NBA Draft de 2019. Además, el Thunder envió a Nueva York a Lance Thomas.
No obstante, eso tres jugadores sin lugar a duda serán colocados en waivers por el hecho de que sus contratos no son garantizados.
Por haber canjeado a Smith, Jackson le ahorró a la nomina salarial de la próxima temporada una opción de jugador valorada en $6.4 millones. En respecto a Shumpert, los Knicks se habían negado a ofrecerle una extensión de contrato en noviembre cuando inició el periodo para que los equipos entraran a nuevos acuerdos con los jugadores que habían sido seleccionados en el sorteo de 2011. Esa decisión prácticamente selló la salida de un jugador que no figuraba como prioridad en el futuro de la organización y cuya oferta de contrato no hubiese sido igualada en el mercado de agentes libres este verano.
El ejecutivo de 69 años, que fue miembro del equipo de los Knickerbockers que le brindó un campeonato a la Gran Manzana en 1970 y el último que ganó la franquicia en 1973, hizo otra gran decisión en colocar en waivers al haitiano Samuel Dalembert, un jugador marginado a quien le iban a tener que garantizar su contrato si hubiese estado en el roster despues de este miércoles.
Un matemático e inteligente, Jackson, fue exitoso en remover $20 millones en salario e impuesto salarial con esas dos transacciones.
Nueva York ahora tendrá un poco más de $30 millones disponible en su límite salarial para repartirlo en el mercado de agentes libres que se avecina mientras trata de construir un equipo alrededor de Carmelo Anthony que sea capaz de luchar por un campeonato.
El arquitecto de 11 anillos como entrenador en jefe de los Chicago Bulls y Los Ángeles Lakers quizás mostró su buena mano sobre una mesa de poker la noche del domingo cuando varios miembros los Westchester Knicks, la sucursal de Nueva York en la D-League, presenciaron desde las gradas la derrota que sufrieron los Knicks en el Madison Square Garden.
Entre aquellos que puedan recibir la llamada se encuentran el griego Thanasis Antetokounmpo, que fue seleccionado en la segunda ronda del sorteo 2014 y cuyo hermano Giannis juega con los Milwaukee Bucks, quienes le propinaron la derrota a los neoyorquinos, y el base Langston Galloway, que tendrá que ser contratado a un contrato de 10 días porque no es propiedad de la organización a pesar de que está asignado al conjunto de Westchester.
La paliza que recibieron los Knicks en Memphis finalmente los colocó en el sótano de la NBA con un triste balance de 5-32 que ni el mismo Zen Master se había imaginado.
Los Knicks y dueños del peor récord de la liga, llevan ventaja de dos juegos y medio — si uno lo quiere de ver de tal manera — sobre los Philadelphia 76ers.
Inicia el plan de Phil Jackson en NY Knicks
LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||
Story
Page