No era famosa

LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||

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Honestamente lamento mucho la trágica muerte del pelotero dominicano y gran prospecto de los Cardenales de San Luís, Óscar Taveras. Nuevamente el exceso de velocidad hablando, dejando claro, que todo tiene su límite y que la prudencia, responsabilidad, atención, precaución, visión son elementos fundamentales, detrás del guía.
 
Hubo un derroche de publicidad, para el destacado y también jugador de Las Águilas Cibaeñas, pero me indigna hondamente que nadie, mencione a infortunada jovencita, que también era parte de la noticia, de la escena, me quedé perpleja, cuando leía titulares como ése «Luto en grandes ligas, por muerte pelotero Óscar Taveras, como si el, hubiese muerto solo, en ése fatídico accidente en su Chevrolet Camaro rojo traído hace semanas de los Estados Unidos.
 
También la muchachita quedó dentro del auto hecho chatarra, en el tramo de la carretera Cabarete- Sosúa, el mojado y peligroso domingo pasado, al chocar con un árbol, se quedaron truncados tantos sueños de ambos.
 
Edilia o Yamali Arverlo, de 18 años de edad falleció en ése suceso, la enterraron en Moca, y los medios no hicieron eco de aquel igualmente triste velatorio, nadie entrevistó a sus padres, ni pusieron en los periódicos el nombre de la funeraria ni donde descansarían los restos de la joven, al parecer novia del pelotero, quienes tenían planes hasta de casarse, según publicó el Periódico El Granero del Sur.
 
A nadie, le importó una hermosa chica, que dejó con su muerte muy triste a su familia, nadie se trasladó a la casa de la muchacha que encontró la muerte, sin sospechar que ése acto imprudencia, troncharía el futuro de él, o de ambos.
 
Me duele, me molesta, me indigna, que la marginen aún después de muerta, que su nombre, no sea importante, como mujer, alzo mi voz, protesto, porque sabemos que la jovencita no era modelo, reguetonera, cantante, Megadiva, presentadora de televisión, periodista, atleta olímpica, política, diputada, doctora, abogada, ni primera dama. Pero era un ser humano, que dejó de existir, un accidente donde afirman los agentes de la AMET, que el exceso de velocidad, causó las muertes de «AMBOS», léase bien, ambos.
 
No vi la foto de la joven más que una vez, el día del accidente, después ella fue olvidada, como no tenía fama ni dinero, pues su muerte no era para estar en todas las páginas de periódicos o noticieros de televisión.
 
Aquí en Puerto Rico, mandan inmediatamente un periodista al funeral de Óscar y otro al de ella, porque no era un adorno, era mujer, era hija, era hermana, era una de tantas, que quizás soñaba con un futuro mejor, pero no, encontró nada, solo su muerte.
 
Seguimos en lo mismo, «El que nada tiene, no es noticia», que barbaridad, es como si Óscar Taveras, chocó sólo, iba en ése carro, es que Yamali Arvelo, también era parte de éste mundo, era que le faltó ser súper conocida, porque no valió que muriese junto con «Fenómeno «, como era llamado Óscar Taveras.
 
Se murió Yamali, por lo menos merecía ser noticias por varios días, ser justamente mencionada, porque también su muerte dolió, porque era joven, porque era llanamente Yamali Arvelo, ése es un nombre, aunque no perteneciera a ninguna organización millonaria de Grandes Ligas. Se murió también la nena y la enterraron, Carajo.