Los últimos acontecimientos que se han producido en la República Dominicana han dejado perpleja a una gran parte de la población, que todavía no acaba por entender, ni mucho menos ha encontrado una explicación lógica al origen de los mismos.
De manera simultánea se produjeron los incidentes que dejaron por lo menos 6 muertos en las cárceles de Najayo y la Victoria, dos de los centros de reclusión de mayor población de internos del país y de esa manera continuaron desencadenándose otros actos que minaron la preocupación de la ciudadanía.
La explosión de un artefacto casero dentro de una mochila en la Línea 2 del Metro de Santo Domingo y el intento de sabotaje a las líneas de alta tensión de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE), son acciones terroristas que por más que pretendamos atribuirles otros calificativos para suavizar los hechos y no llevar mayores preocupaciones a la población, siempre serán interpretados así por todo aquel que tiene dos dedos de frente en nuestro país.
Los muertos de Najayo y los heridos del Metro no pueden cargar solos con el impacto de las acciones que terroristas y delincuentes ejecutaron en los últimos días en la República Dominicana, por lo que el gobierno debe asumir la responsabilidad de hacer todo lo que sea posible para dar con el paradero de los responsables de estos hechos, someterlos a la justicia y explicar el origen de los mismos, porque es una de las cosas que ha creado mayor preocupación e indignación entre los dominicanos.
A raíz del surgimiento de estos hechos, parecidos a escenas tomadas de las películas de terrorismo y delincuencia que acostumbramos a ver en el cine y la televisión, han sido muchas las interrogantes que expertos o no en la conducta humana se han formulado respecto al origen de los mismos.
Hay quienes, incluso, han llegado a creer que se trata de todo un plan dirigido a crearle un gran malestar al gobierno con el propósito de disminuir la alta popularidad que mantiene el presidente Danilo Medina y que hasta este momento lo coloca como único político que garantizaría ganar las elecciones en primera vuelta y que en el mismo estarían involucrados sectores de la oposición y del Partido de la Liberación Dominicana (PLD).
Otras de las interrogantes que se han manejado en la sociedad dominicana tiene que ver con el enfrenamiento que se ha producido entre el Procurador General de la Republica, Francisco Domínguez Brito y el Senador de San Juan de la Maguana Félix Bautista, con el deliberado objetivo de crear las condiciones de hacer fracasar al representante del Ministerio Publico para que sea removido del puesto y que el expediente que vincula al legislador oficialista sea dejado sin efecto en la Justicia dominicana.
Sin embargo, nosotros vamos más lejos y creemos que se trata de todo un plan más amplio e incluyente que obedece al desarrollo del proceso de incubación que se ha gestado en el país proveniente de las diferentes manifestaciones delictivas y terroristas aprendidas por diferentes actores de la sociedad dominicana que las han querido poner en práctica para llamar la atención y programar acciones futuras que podrían desestabilizar al gobierno y al país con el objetivo de lograr propósitos particulares de grupos delincuenciales organizados.
Por las inquietudes que ha manifestado el país y por esta aseveración que hacemos en aras de alertar a las autoridades para que pongan en funcionamiento los organismos investigativos del Estado, es que las cosas no se deben quedar en punto muertas, porque de no tomarse las medidas que se deben tomar hoy, entonces las acciones serían más contundentes en el futuro no tan lejano.
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Hechos contundentes, bochornosos y aleccionadores
LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||
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