Inicio mis palabras en este día maravilloso, invocando la bendición del Todopoderoso para que su manto divino cubra la naturaleza de este acto solemne, trascendente en todos los sentidos de nuestra historia institucional.
Su presencia Señor Presidente en el Palacio de la Policía Nacional, representa un honor para todos los miembros que vestimos este uniforme, pero sobre todo envía una poderosa señal de su decisión de Estado de apoyar los procesos de reforma y profesionalización de esta institución, para que sea más efectiva en el cumplimiento de los deberes que le imponen la Constitución y las leyes.
Tradicional e históricamente, los altos índices de criminalidad y la presión ejercida por los medios de comunicación, han obligado a la alta gerencia policial a trabajar en el día a día, sin detenerse a evaluar resultados de las actividades fundamentales, para planificar, diseñar y desarrollar programas estratégicos que permiten de forma metodológica, sistemática y con visión de futuro, enfrentar efectivamente los avances de la delincuencia.
Resolver lo urgente es la prioridad, dejando lo importante siempre en segundo plano.
Lamentablemente, en la Policía Nacional sólo se había visualizado la ocurrencia del delito común, lo que obligaba a los que anteriormente dirigieron la institución, adoptar una actitud de reacción y la aplicación de métodos represivos, para de forma no muy ordenada tratar de disuadir los avances de la delincuencia.
Estrategia que ha contribuido a una pobre valoración de la sociedad dominicana al trabajo que realiza la entidad policiall.
La ubicación geográfica privilegiada de la República Dominicana, ha permitido al crimen organizado internacional, cualquiera que sea su manifestación, utilizar el territorio para realizar operaciones de entrada y salida, actividades éstas que se convierten en serias amenazas para los ciudadanos, el sistema democrático y los intereses de la nación.
Es penoso reconocer que las actividades del crimen organizado sobrepasan la capacidad de repuesta de la institución. Los asesinatos cometidos por esta estructura criminal generan una alta percepción de inseguridad, al tiempo que sus actividades inciden en elevar los niveles de violencia y delincuencia. Lo que dificulta cumplir efectivamente con la garantía de la seguridad ciudadana.
La Policía Nacional se prepara para enfrentar con profesionalidad esos desafíos. En esta histórica mañana quedará inaugurado el Centro de Inteligencia Contra el Crimen Organizado, adscrito a la Dirección Central de Inteligencia Delictiva, DINTEL.
Este centro de inteligencia, pone a la institución en capacidad de trabajar de manera proactiva contra el crimen, esto es, antes que ocurra el delito, reforzará y mejorará la capacidad de repuesta de la investigación criminal. Contará con avanzados equipos tecnológicos de última generación, lo que facilitará el desarrollo de unidades policiales especializadas, en capacidad de producir inteligencia sensitiva para enfrentar las estructuras del crimen organizado que operan en el territorio nacional.
Desde su puesta en marcha, la DINTEL incrementará el soporte de inteligencia al alto mando policial, para que estos mejoren su toma de decisiones, su planificación estratégica y sus capacidades operativas.
El moderno Centro, permitirá desarrollar el Departamento de Contrainteligencia, para evitar la filtración del crimen organizado en las unidades y mantendrá la integridad en la institución.
Permitirá mejorar el intercambio de información con las agencias e instituciones encargadas de persiguen el crimen organizado transnacional.
Además con la entrada de esas instalaciones, se unificará los esfuerzos de ser una nueva y moderna entidad capaz de enfrentar los retos cambiantes del siglo XXI y cumplir con una de las prioridades expresadas por el Presidente en el Plan Nacional de Seguridad Ciudadana.
Damas y caballeros.
Desde que comencé mi labor al frente de la Policía, y siguiendo el mandato del Señor Presidente, hemos trabajado incansablemente para desarrollar un nuevo modelo de gestión policial, el cual garantiza la implementación de acciones concretas con las cuales avanzamos con pasos firmes en el proceso de reforma y modernización de todas las áreas de la institución policial.
Para la dignificación de la labor policial, el Sr. Presidente instruyó a la Oficina Presidencial de Desarrollo Provincial, la construcción y remodelación de 105 dotaciones policiales, con facilidades que demandan los tiempos modernos, de las cuales ya se han inaugurado 48.
Logramos un aumento salarial de todos de nuestros agentes, entrega de nuevos uniformes, y el equipamiento como mandan las normas policiales modernas.
Recientemente fue entregado un edificio de 22 apartamentos y próximamente otras 42 familias policiales tendrán su techo en el Barrio de la Policía con la inauguración de 2 nuevos edificios.
Lugar donde días atrás el Presidente Danilo Medina, dejó inaugurada una escuela primaria y un liceo con tanda extendida, lo que garantiza la educación de los hijos de los policías residentes allí, y que tengan desayuno, comida y merienda.
Hemos dotado a nuestras Direcciones policiales de 1,159, unidades patrulleras, lo que nos ha permitido establecer un efectivo sistema de patrullaje por corredores y cuadrantes para mejorar la seguridad preventiva.
Aumentamos sustancialmente el número de policías en las calles, especialmente en las áreas más vulnerables, al tiempo que hemos mejorado nuestra efectividad y tiempo de repuestas.
En esta Jefatura, la capacitación policial dejó de ser un castigo para los policías desenllavados, ahora es un requisito para ocupar una posición de mando. nuestro sistema educativo a capacitado 9,129 agentes en las diferentes áreas del saber policial.
Tenemos la esperanza, en el presente año dar inicio a la construcción de la Plaza Educativa, en la que funcionará la Universidad Policial, que permitirá la profesionalización de la carrera de nuestros miembros.
Estamos informatizando todos los procesos de la institución, creando Centros de Atención a los Ciudadanos, donde ya nuestros agentes no reciben las denuncias en mascotas o un pedazo de papel, que posteriormente terminaban en el zafacón, ahora las denuncias de los ciudadanos son recibidas en un computador, y almacenadas en una base de datos.
La Dirección de Inteligencia realiza masificaciones y geo referencia del comportamiento del delito para enfocar nuestras operaciones en los lugares más afectados.
Ahora con orgullo podemos presentar una nueva fachada del Palacio de la Policía, que muestra a los ojos de la sociedad la nueva imagen de que estamos cambiando, pero sobre todo transformándose profundamente por dentro, para llevar a otro nivel el concepto de seguridad ciudadana, con una nueva visión de futuro, más preventiva, comunitaria y proactiva.
Trabajamos en el cambio de culturas negativas de nuestros miembros, desarraigando las malas prácticas, el macuteo y los arrestos molestosos, estamos realizando evaluaciones del desempeño que nos permitan premiar a los buenos y apartar a los malos policías.
Ahora como nunca, trabajamos de la mano de la comunidad, recientemente graduamos 426 niños y jóvenes de nuestros barrios como policía juvenil comunitario, para prevenir que caigan en las garras de la delincuencia.
Esta es una labor fundamental para nosotros, en la cual no vamos a bajar la guardia. Porque sólo así lograremos trasformaciones profundas y duraderas que cambien a la policía por dentro y por fuera. Cambios que nos permitan, de una vez y para siempre, recuperar y mantener la confianza de la población en nuestra institución.
Su Gobierno señor Presidente, está realizando un enorme esfuerzo humano y financiero para llevar a la ciudadanía una policía cada vez más profesional, mejor preparada y equipada, que nos permita llevar seguridad a todos los rincones de nuestro territorio.
En definitiva, nunca antes en nuestro país un mandatario había invertido tanto en la seguridad ni en la Policía.
Señoras y señores.
Permítame decirles que todos estos esfuerzos que hemos puesto en marcha ya han empezado a dar sus frutos.
No los quiero aburrir con cifras, pero sólo para que se hagan una idea, la tasa de criminalidad se redujo cinco puntos porcentuales y pasó de 23.4% en el 2012 aun 18.3% en lo que va del presente año.
Esta es la primera vez desde el 2003 en que esta tasa de criminalidad se mueve a la baja. Es decir, hemos conseguido revertir una tendencia que venía creciendo desde hace una década.
Nunca antes nuestras calles habían tenido tantos policías al servicio de la gente 24 horas al día, 7 días a la semana, los 12 meses del año.
Durante nuestra gestión y hasta la fecha, se han detenido a 40,342 delincuentes acusados por diferentes delitos, de ellos la cantidad de 22,614, por robos y atracos.
En el mismo período la Policía ha incautado la cantidad de más de un millón setecientos mil gramos de diferentes drogas narcóticas, cifras que evidencian que hemos triplicado los esfuerzos en la lucha contra el microtráfico.
Me llena de orgullo decir que nuestra Policía ha enfrentado con profesionalidad y entrega uno de los mayores retos que se nos han presentado en los últimos años. Me refiero a la puesta en marcha del Sistema Nacional de Atención a las Emergencia y Seguridad 911.
Formar parte del 911 nos ha dado la oportunidad de trabajar de manera coordinada con las demás instituciones de repuestas a emergencias del país y eso ha contribuido enormemente a la transformación positiva que está viviendo la Policía.
Quisiera aprovechar este acto para felicitar a todos nuestros agentes del gran Santo Domingo y a todo el cuerpo policial, por el buen desempeño que tienen cada día en esta labor, que está dando excelentes resultados.
La última evaluación de desempeño del 9.1.1 nos dice que el nivel de satisfacción de la población hacia la Policía es del 86%.
Eso nos llena de alegría, por supuesto, pero también debe seguir impulsándonos a trabajar cada vez con más entrega, para mantener y mejorar esos buenos resultados.
Señor presidente.
Hoy le volvemos a reiterar, no lo vamos a defraudar. Para garantizar la reforma, el fortalecimiento y profesionalización de la Policía Nacional que la sociedad dominicana exige y tanto merece sólo necesitamos confianza, recursos y tiempo.
No puedo finalizar sin antes, dar gracias a todos los que forman parte de este gran cambio en el que estamos poniendo todo nuestro entusiasmo y dedicación, gracias por confiar en nosotros, gracias por la unidad de criterios y genuino amor a la Patria, para conservar muestra República Dominicana sana y salva como legado imperecedero del patricio Juan Pablo Duarte.
Muchas gracias.
Aparato de inteligencia combatirá crimen organizado
LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||
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