A lo largo del partido la selección mexicana siguió la misma tónica y estela en cuanto al trabajo defensivo donde el equipo se encontró muy bien posicionado. A pesar de ello la canarinha tuvo 3-4 ocasiones muy claras que salvó un providencial Guillermo Ochoa bajo palos que hizo un partido sensacional. Julio Cesar también destacó al salvar 2 disparos exteriores de gran peligro por parte del conjunto mexicano que tras el descanso salió muy activo y con mucho peligro en ataque.
Los jugadores de Brasil más destacados fueron Luiz Gustavo, Julio Cesar, Oscar y Neymar. Por parte de México los jugadores más destacados a lo largo del partido fueron Rafa Márquez, Guardado, Layún y Ochoa.
DESDE EL PUNTO DE VISTA TÁCTICO
La Selección Brasileña de Felipe Scolari jugó con un esquema 1-4-3-3 destacando por dar mayor libertad de movimientos a jugadores como Oscar o Neymar así como las incorporaciones al ataque de Paulinho desde el interior que poco efecto produjeron con dicho planteamiento por lo que en algunas fases del juego variaron ofensivamente jugando con un 1-4-2-3-1 donde Neymar dejó la banda para que la ocupase Ramires y pasase a ocupar la posición de mediapunta y desarrollar más su juego interior.
En fase ofensiva, la canarinha tuvo bastante problemas a la hora de hacer un juego mucho más combinativo y llevarlo por el carril central dada la densidad defensiva y el buen planteamiento en dicha fase del conjunto mexicano, por lo que tenía que desarrollar mucha más su juego por los carriles laterales donde destacaron especialmente las incorporaciones de Marcelo con sus continuas conducciones para ir fijando y atrayendo defensores y generar algún espacio en banda y que pudiera ser aprovechado por Neymar, Oscar, Ramires o Bernard cuando interactuaban por su zona. Otro de los recursos en ataque eran los contraataques directos tras el robo de balón en campo contrario.
A pesar de los múltiples ofrecimientos de Oscar y Neymar, llegando incluso a la zona de ½ campo para contactar con el balón, dichos jugadores se encontrados muy cubiertos por la defensa mexicana que practicaron muy bien las superioridades numéricas y las anticipaciones para que no entraran en contacto con el balón.
A pesar de la novedad de Ramires en el once inicial y que podría aportar rapidez en la fase de ataque organizado y en las transiciones, actuó en una banda y otra permutando con Oscar pero sin fortuna alguna siendo mucho más determinante en la 2ªMitad Bernard ocupando su posición ya que es un jugador de mucha más movilidad, sobre todo por tener un mejor juego fuera-dentro.
DESDE EL PUNTO DE VISTA TÁCTICO
La Selección Mexicana de Miguel Herrera juega partiendo con un esquema 1-5-3-2 que destaca por las rápidas recuperaciones de balón y transiciones rápidas mediante contraataques directos por el carril central iniciados por Herrera o Rafa Márquez buscando a los dos delanteros referentes de gran movilidad y eléctricos como son Gio y Peralta.
En fase ofensiva, el combinado azteca, además de lo mencionado anteriormente destaca también por la forma en la que el juego parte desde el longitudinal y central del campo que tienen como vértices y puntos centrales tanto a Rafa Márquez como Vázquez por su forma de distribuir el juego tanto en vertical buscando a Gio, Peralta o Herrera como de forma horizontal buscando a los carriles laterales que tienen un especial predominio al tener jugadores como Layún que más que ser un lateral al uso es un carrilero muy completo que realiza grandes funciones tanto ofensivas como defensivas. Hablando de este apartado no nos podemos olvidar tampoco de las incorporaciones de Aguilar y las apariciones de Guardado en el carril izquierdo proporcionando así mucho más peligro y quebraderos de cabeza a Dani Alves ante la presencia de este y Layún.
Viendo lo anterior se pudo ver durante el encuentro como en ataque el conjunto mexicano pasaba a utilizar una variante ofensiva con un esquema 1-3-1-4-2 o un 1-3-5-2 dadas las incorporaciones de esos carrileros.
Con la movilidad de los puntas, las incorporaciones de los carrileros y ofrecimiento de Vázquez o Guardado, realizaron acciones mediante el uso de la pared para superar rápidamente a la defensa carioca que resultaron de forma óptima.
Uno de los recurso muy utilizados en el partido por parte de México y sobre todo en el 2º Tiempo, fue la ejecución de disparos lejanos desde fuera del área por parte de Vázquez, Herrera y Guardado buscando sorprender a Julio Cesar.
PLANTEAMIENTO DEFENSIVO DE AMBOS EQUIPOS
El planteamiento defensivo de Brasil a la hora de defender en campo propio el sistema defensivo utilizado principalmente era el 1-4-4-1-1 muy encima de los jugadores rivales, aunque en alguna ocasión se podía ver un 1-5-4-1.
En esta fase del juego, el equipo carioca destacó en los siguientes aspectos:
Defendían en bloque alto dado que cuando se encuentran en fase ofensiva se encuentran en esta disposición por lo que cuando pierden la posesión del balón les resulta más fácil presionar al equipo rival cerca de la portería contraria evitando así recorrer menos distancia y tener más apoyos cercanos tanto para defender como en el caso de recuperar la posesión hacer un contraataque rápido.
La presión alta en campo contrario obligó la mayoría de las ocasiones a Ochoa a jugar en largo por lo que podían hacer con la posesión.
El papel de Luiz Gustavo en cuanto a la ayuda de los centrales y generando superioridades numéricas en la banda del lateral derecho para recuperar la posesión rápidamente.
A pesar de su buen planteamiento y disposición, tuvieron problemas en los siguientes aspectos:
Excesiva basculación en las jugadas o defensa muy junta que creaban zona despejada en el lado contrario donde se encontraba el juego y con el consiguiente peligro.
Problemas con el juego rápido de paredes y combinaciones al primer toque en la zona de la frontal del área de penal.
Pérdidas, sobre todo en la 1ª Parte, de Dani Alves a la hora de combinar con compañeros o hacer devoluciones que provocaron contraataques por parte de México.
Dejan ciertas facilidades para que jugadores como Vázquez, Herrera o Guardado pudieran ejecutar disparos lejanos desde fuera del área.
Problemas en el carril defendido por Dani Alves antes las incorporaciones ofensivas de Layún u ocupación de la zona por Guardado, ya que desarrollaron mucho su juego por dicha zona.
PLANTEAMIENTO DEFENSIVO DE AMBOS EQUIPOS
El planteamiento defensivo de México a la hora de defender en campo propio fue realizado siempre bajo un sistema 1-5-3-2 y en algunas ocasiones un 1-5-4-1.
En esta fase del juego el equipo azteca destacó por realizar un trabajo constante y de oficio a lo largo de todo el encuentro que se vio reflejado en los siguientes aspectos:
Equipo con mucha densidad y constituido en bloque bajo-medio que impedía el juego interior de Brasil.
Correcto equilibrio y coordinación entre las líneas. Destacaron en especial jugadores como Rafa Márquez y Héctor Moreno en esta fase del juego siendo grandes recuperadores de balones.
Realización de presión muy encima y provocando el fallo, por lo que se veía Brasil en la obligación de retrasar el juego a los centrales.
Superioridades numéricas en banda para la rápida recuperación de balón.
Jugadores como Oscar o Neymar a los que le practicaban las entradas en superioridad numérica así como el correcto uso de la anticipación.
Destrucción del juego rival mediante el uso de la falta táctica o carga reglamentaria.
A pesar de su buen planteamiento y disposición, tuvieron problemas en los siguientes aspectos:
Transiciones ofensivas de Brasil.
Perdidas de balones en campo propio y zonas cercanas al área provocados por la presión del combinado carioca.
LA CLAVE DEL PARTIDO: EL MURO AZTECA
Las claves principales del partido que fueron planteadas por Miguel Herrera y que siguieron sus pupilos a lo largo de todo el encuentro para minimizar el ataque brasileño fueron las siguientes:
Trabajo defensivo donde tuvieron especial importancia la coordinación entre líneas y la correcta ocupación de espacios.
La densidad de jugadores en el carril central lo cual impidió a la canarinha poder desarrollar su juego combinativo y que solo le limitó al juego por bandas o contraataques tras robo de balón.
El uso de la anticipación y el marcaje en superioridad numérica de los jugadores clave como Oscar y Neymar.
El trabajo defensivo de recuperaciones de balones de Rafa Márquez y Héctor Moreno.
La gran actuación de Guillermo Ochoa bajo palos que hizo un gran partido con sus paradas.
Brasil no consigue superar la fortaleza azteca
LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||
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